BEETHOVEN R. + SEXPLOSION – SALA WE ROCK, MADRID – 08/02/2013
Y bajo la piel… ROCK
La noche del pasado 8 de Febrero se presentaba muy interesante en la Sala We Rock de Madrid gracias a la presencia de dos bandas que hablan tanto de lo nuevo como de lo más experimentado en términos de hard rock nacional. Por un lado teníamos a BEETHOVEN R. en un nuevo acercamiento a sus fans madrileños, esta vez más de un año después de que grabaran su último trabajo en directo “Dejándonos la piel” y al mismo tiempo presentándolo de cara a afianzar definitivamente y hacia el futuro la voz de Alberto al frente de la banda, y por el otro un nuevo concierto de los cada vez mejor considerados SEXPLOSION, que siguen explotando con la fuerza de su primer y único disco “Powerful as its name” su oportunidad de ir labrándose un buen nombre en la escena estatal.
SEXPLOSION
De esta forma, y con cierto retraso con respecto al horario previsto, comenzaría la noche con la descarga de SEXPLOSION, algo que, tras presenciar el conciertazo que nos ofrecería la banda liderada por G. Starless, no puede definirse de otra forma más que de descarga. Descarga de actitud, descarga de vatios, descarga de diversión y descarga de una más que agradable ración de sleazy-hard rock por parte de un cuarteto en el que todos van a una y tienen claramente asumido el papel que tiene que cumplir una banda de sus características sobre un escenario.
La actuación comenzó prácticamente sin detenerse durante los tres primeros temas, unos ácidos y atractivos “She’s Reddy to Lick”, “Don’t tell me who I am” y “Justified agression” que SEXPLOSION interpretó casi al margen de que el público aún se estuviera acomodando sobre la pista de la We Rock para acabar finalmente con una entrada que no sobrepasaría la mitad del aforo en ningún momento, pero que fue más que suficiente para ofrecer un buen ambiente de fiesta y ganas de disfrutar del rock.
Tras un ínfimo parón volvieron a la carga de nuevo con “The sick circus of Hate’s architect” y la directa y llena de energía “Just Fight”, momento en el que ya el ambiente empezaba a caldearse y los primeros gritos hacia la banda comenzaban a materializarse en forma de palabras y actitudes de jolgorio y buen rollo, aspecto este último que probablemente sea una de las virtudes primordiales del cuarteto madrileño.
Pero también se trata de una banda que derrocha calidad, algo que aporta seguridad y autenticidad a su actitud, así como solvencia a la hora de afrontar clásicos como el “You Could be Mine” de Guns And Roses que, por supuesto, representó uno de los momentos más coreados de la actuación de SEXPLOSION.
A partir de aquí SEXPLOSION ya se habían ganado el favor del público y salvo ciertos detalles de sonido de la sala que siempre se pueden mejorar, el resto del concierto estuvo plagado de buenos temas y una banda engrasada a las mil maravillas que destacó a través de cortes como “Love’s Infected”, “I don’t need anything about you” o el final con una nueva versión, en esta ocasión de los australianos AC/DC, el no tan habitual “If you want blood”.
Caldeado y preparado el ambiente de forma magnífica por SEXPLOSION lo cierto es que los madrileños BEETHOVEN R., después de un año con bastantes altibajos en lo que respecta a su gira nacional, volvían a Madrid para demostrar no solo que por lo menos son profetas en su tierra, sino que el potencial que despliegan en directo sigue siendo uno de los atractivos que el público en general no debería desdeñar a la ligera, puesto que es una de esas formaciones que asegura tanto calidad como buena actitud sobre un escenario.
Así pues BEETHOVEN R., tras la intro de rigor, salieron enchufadísimos, a pesar de un pobre sonido en los primeros compases del concierto, con “Fuera de Control”, “Yo me Pierdo” y “Quien irá a por ti soy yo”, primer tema de la noche donde la banda dedicó sus primeras palabras al respetable y donde éste comenzó a disfrutar de verdad de la actuación de los madrileños, quienes seguro sienten como vibra la audiencia cada vez que recuperan algún tema de aquel exitoso “Un poco más”, probablemente el mayor hito en su carrera.
Tras ello un viaje a “El legado de Judas” nos trajo temas como “Siempre unidos al rock and roll” y “No permitas que esto llegue al fin”, ambos con mensajes que el propio Alberto García a la voz quiso transmitir como llamadas de la banda a los fans que habían registrado una media entrada alta en la We Rock para verles.
Y es que Alberto ha conseguido tan solo en unos pocos años afianzarse como la cara visible de estos nuevos, pero clásicos, BEETHOVEN R. no solo gracias a su actitud y su pose descarada ante el micro, sino por supuesto también a su capacidad de hacer suyos los temas de toda la carrera de la banda sin que estos pierdan ni un solo ápice de su identidad o su fuerza. Sin duda uno de los mayores aciertos de BEETHOVEN R. en mucho tiempo tras las idas y venidas de un Iván Urbistondo cuyo regreso no supuso el revulsivo que el grupo esperaba en “Más vale tarde… que nunca”.
En lo que respecta al resto de la banda, mientras caían temas como el lejano y celebrado “Sangriento y Mortal” o el más cercano single titulado “Da igual”, todos demostraron estar en este barco por pura pasión y devoción por el hard rock y la vida sobre un escenario. La energía de José Luis Saiz a la guitarra y la simpatía de Moreno al bajo le ponen el corazón de toda una trayectoria detrás, mientras que la sobriedad de Antonio Alcoba junto al buen hacer del último en incorporarse al barco, el guitarrista Javier Oliva, hacen del quinteto una formación sólida y potente en directo que dio la impresión de comenzar a remontar el vuelo de una vez por todas.
No obstante BEETHOVEN R. cuenta con poderosas armas con las que encandilar al público más clásico, su divertida versión del “Más Sexy” de COZ, que probablemente incluso muchos ya vean como suya propia, la desenfadada “Tan duras Tan Dulces” o el precioso momento de la balada “Y donde estás” dieron buena cuenta de todo esto que digo.
Una vez hecho todo esto la recta final del concierto para BEETHOVEN R. fue como correr con el viento a su favor. Público entregado, banda a gusto sobre el escenario y temas tan clásicos como el mítico “Ja, Ja” o el desafiante “Un poco más” fueron poniendo punto y final a un estupendo concierto que acabó, tras “Hazme tuyo esta noche”, con «El guardián de tu piel», ese tema que no puede faltar cuando se habla de BEETHOVEN R., el éxito eterno de los madrileños y razón última con la que, a día de hoy, les pertenece una página en la historia del rock de este país.