Entrevista a MEINSTEIN: “La gente no busca una hora y media de show, sino una experiencia agradable que dure toda la noche”
El pasado día 15 de diciembre, actuaban MEINSTEIN en la sala Salamandra de L’Hospitalet, un tributo a los alemanes RAMMSTEIN. Ellos nacieron en el 2012 y son prácticamente la réplica de los originales. Logran una puesta en escena increíble, de la que nos hacemos una idea viendo los vídeos que dispone la banda en su canal de YouTube. Joss Metalcry tuvo la ocasión de entrevistar a dos de sus componentes, David Sarabia (guitarra) y Erik Segel (voz), y aquí tenéis el resultado.
Lleváis desde 2012 con una trayectoria intachable y defendiendo con carácter esta iniciativa tan estupenda. ¿Cómo resumirías vuestra trayectoria desde esos inicios hasta el momento que estáis viviendo ahora?
David: Pues, por decirlo de alguna manera, sorprendidos de lo que somos capaces de hacer tras muchas horas de ensayo e imaginación para plasmar los efectos y puesta de escena de Rammstein a pequeña escala. En un principio fantaseábamos con lo que podríamos hacer para emular a Rammstein, pero seamos realistas: imitar su show era muy complicado. Por suerte, José (batería) es un genio. El tío sabe de todo: empezó montando con cuatro maderas y mecanismos varios unos grandes ventiladores con sus luces.
Con el dinero de los primeros bolos, compramos dos máquinas de CO2, él fabricó una tercera e hizo toda la instalación, y la cosa ha ido creciendo. Sin José, realmente no funcionaría esta banda. Recuerdo que el primer bolo lo hicimos en el tristemente desaparecido Heaven and Hell de Cerdanyola, con capacidad para 60 personas. El escenario era diminuto: nos metimos todos apretaditos y los ventiladores nos servían para hacer más profundo el escenario y subirnos encima de ellos.
La gente empezó a creerse que había un grupo que hacía covers de Rammstein pero que sonaba totalmente a ellos: unos tíos locos que se han pasado horas y horas comiéndose la cabeza para lograr ese efecto tanto sonoro como visual, y que cada euro que ganaban lo invertían en engrandecer un espectáculo; todo esto sin saber realmente si los iban a ver como una ridícula parodia o en cambio iban a disfrutar de un show que les llenara por completo.
Y así hemos seguido, invirtiendo todo el dinero ganado en ir mejorando el espectáculo, muy orgullosos de la gente que nos sigue, nos apoya, nos animan. E incluso, si alguna vez a alguno de nuestros juguetitos le da por no funcionar, nos aplauden y corean aún más. Ese es el truco: ser valiente, amar a tu público y ser una familia, porque si alguien de la banda no lo viera así, la cosa no funcionaría. Y, a día de hoy, la gente nos conoce más, tenemos la fortuna de tocar en salas guapas y de hacer amigos en las ciudades que visitamos. Pero el curro nos lo seguimos metiendo a saco: el que ha visto un montaje de Meinstein antes de un concierto te lo puede contar, pero el resultado vale la pena.
No es lo más común hacer un tributo a un grupo que cante en alemán, más que nada por la complejidad del lenguaje. ¿Por qué os decantasteis por versionar a RAMMSTEIN y no a ninguna otra banda?
David: Sencillamente porque somos muy fans de la banda, y la gran suerte de encontrar a Erik mediante un anuncio, un chavalillo (porque lo era cuando entró) que se interesó desde pequeño por la lengua germana para entender a Rammstein.
Erik: Ya te digo. El primer día que fui a probar con ellos, estaba con una gripe que no me tenía en pie. Desde mi casa, para ir al local tienes que coger el coche. Como no me atreví a cogerlo, le pedí a mi madre que me llevase: además, la tía es tan fan de Rammstein como yo. Y, claro, viene un chaval de 19 añitos a probar voces el primer día acompañado de su mamá… pues ya ves que el nivel de anécdotas en este grupo iba a ser considerable.
Mira, yo conocí a Rammstein con 12 años y supe que quería aprender el idioma. Empecé a aprender de forma autodidacta, luego hice alguna asignatura de alemán en secundaria, más tarde decidí estudiar Traducción e Interpretación de alemán, y ahora soy traductor técnico de alemán en una agencia. Es flipante cómo un grupo puede definir tu vida entera. Así que, al menos por mi parte, si decidí colaborar en una banda tributo a Rammstein es porque los venero como a dioses, quería divulgar su música y quería sentir lo que ellos sienten.
Sois prácticamente la réplica exacta de sus espectáculos, pues, aunque no tengáis su infraestructura, no dejáis indiferente a quien os va a ver en directo y dejáis buen sabor al respetable. ¿Cuáles son los principales reclamos que esgrimiríais ante el público que aún no os haya ido a ver alguno de vuestro show?
David: A los fans de Rammstein les diríamos que disfrutarían de una velada 100% Rammstein, en tamaño pequeño, pero que se irán a casa con una gran sonrisa en la cara. Y, a los que no los conocen lo suficiente, les vamos a mostrar por qué es una banda tan especial y diferente de las demás. En ocasiones hemos conocido a gente que tenía prejuicios, que no conocían a Rammstein, etc., y que, al vernos, se han ido flipando, como sin saber aún qué es lo que les ha pasado por encima: lo único que saben es que esto no ha sido un concierto normal, se sale de las reglas… incluso, en algunos momentos, es hasta inmoral [risas].
Erik: Coincido con David. Pero también creo que mucha gente se queda prendada de los contrastes que se viven. En el plano musical, sonamos razonablemente bien, porque llevamos ensayando tres días a la semana durante seis años, y todo está donde debe estar. Y con un sonido correcto puedes gustar al público una noche, pero quizá no repitan. Sin embargo, creemos que la gente no busca una hora y media de show, sino una experiencia agradable que dure toda la noche.
Por tanto, en el escenario nos ven como unos tíos bordes haciendo cosas impactantes, pero luego todo acaba, nos bajamos a charlar con ellos, nos hacemos fotos si nos las piden y nos mostramos como realmente somos: humildes y, por lo general, tímidos. Eso suele descolocarlos y, por alguna razón, les deja un buen sabor y deciden volver.
¿Os habéis planteado hacer canciones propias o no está entre vuestras prioridades de momento?
David: Alguna vez lo hemos comentado. Por el momento no es una de nuestras prioridades, en caso de que lo hiciéramos, lo más probable que fuera bajo otro nombre.
Muchos grupos con canciones propias están en contra de este fenómeno de bandas tributo que cada día proliferan más. ¿Hay miembros de MEINSTEIN que toquen en alguna otra banda?
David: Kevin (bajista) tiene una banda (Ocata) que está a punto de entrar en estudio por segunda vez, Erik está grabando su propio disco en solitario en el cual tengo el privilegio de colaborar. El resto, imposible dedicarle más tiempo a la música: trabajo, mujer, niños, etc.
Erik: No voy a aprovechar esta pregunta para hacer promo de mi disco. Imagínate lo inapropiado que quedaría decir que el disco se llama “One-night marriage” y que tiene 11 canciones. No puedes utilizar la entrevista a Meinstein para decir que el CD se podrá escuchar en Spotify, YouTube, Bandcamp y que se podrá adquirir en formato físico.
¿Habéis actuado en otros países como banda tributo?
David: Todavía no, nos llamaron para tocar en un festival en Alemania, pero económicamente no cubría los gastos. Una pena, estuvimos muy cerca, imagínate un grupo Tributo a Rammstein de Barcelona tocando para alemanes, todo un honor que se fijaran en nosotros, pero no pudo ser.
Estaréis deseando que regresen los verdaderos al ruedo, os queda poco para deleitaros con el nuevo material de canciones inéditas, tras una década sin hacer nada bajo el nombre del grupo. ¿Qué futuro les auguráis tras las declaraciones que hicieron hace algún tiempo de que este sería su último álbum?
David: Personalmente creo que se tirarán unos años de gira y luego volverán a tener un largo descanso; quizá harán nuevos vídeos en directo y, luego, ya todo dependerá del cansancio y la energía que les quede. Por mí, ojalá duraran toda la vida pero, quién sabe, creo que realmente no lo saben ni ellos. Las declaraciones pueden ser perfectamente lo que piensan hacer, o bien pueden ser hechas desde la fatiga de una gira, por la producción del último disco o bien las propias relaciones humanas, etc.
Erik: Como fan acérrimo de Rammstein: ojalá no se separasen nunca; nos partirían el alma a muchos. Pero también hay que tener cuenta que lo que caracteriza a Rammstein es que hay fuerza, furia y mucha verdad en su música y sus letras. Lo único que espero es que, si alguna vez se les apaga la llama y se les va la inspiración, que no sigan por seguir. Ya hemos visto a muchos grupos que han entrado en ese declive y es una lástima. Cuando pasa esto, prefiero que el grupo pase a la historia como una revolución, dejando el listón bien arriba y como una leyenda.
Tengo entendido que todos vosotros sois de la provincia de Barcelona y el único concierto que darán en el 2019 será en el campo de fútbol del Español, en Cornellà de Llobregat. ¿Qué significa para vosotros este hecho?
David: Imagínate, un sábado y para redondearlo el día siguiente es mi cumpleaños: creo que es mi regalo de aniversario [risas].
Erik: Es un auténtico honor. No creo que hayan escogido Barcelona porque el público de aquí sea más cálido o alborotado que el público de Madrid, Bilbao o Sevilla. No sé, quizá en su última visita fueron a algún sitio de la ciudad que les gustó y quieren repetir. Además, es una actitud muy propia de Rammstein: «como solo hacemos un concierto en el país, pensáis que será en la capital, ¿verdad?», y al final te salen por otro lado.
Tendréis un repertorio bastante extenso de canciones, pues iréis cambiando el set list según las condiciones, pero lo que me gustaría a mí saber es lo siguiente. ¿Cuál crees que es la canción que más disfrutáis al hacer en los conciertos?
David: ¡Buff! la mayoría. Pero si tuviera que elegir solo una sería “Mein Herz Brennt”. Me pone la piel de gallina ver cómo el público la corea: una auténtica pasada.
Erik: En mi caso, “Ohne dich” o “Mutter”. Más que por cuánto coree la gente, es por lo a gusto que me siento al cantarlas. Piensa que mi voz es muy distinta a la de Till Lindemann y que, por tanto, llegar a sus graves me cuesta muchísimo y tengo que forzarlos. Sin embargo, en estas canciones voy muy relajado y, qué cojones, que son preciosas y te dejan la lagrimilla a dos milímetros de salir.
¿Habéis tenido la ocasión de conocerlos en persona y hablar con ellos?
David: ¡Qué va! Lo suyo sería que la promotora o alguien similar montara alguna fiesta el día antes del concierto de Rammstein y nos invitasen a tocar con alguno de los componentes delante, e incluso participando –bueno, creo que estoy flipando un poco, perdona, José [risas].
Erik: Ojalá. Creo que si los tuviera delante, me temblarían las piernas y no me saldrían las palabras. Por eso pensé hace años lo que les diría si los tuviera delante, para que salga de forma automática, sin pensarlo: «Ihr seid einfach Götter für mich» (sencillamente, sois dioses para mí).
Tenéis varios vídeos en YouTube con una excelente calidad, creados por Josh Halfon. ¿Los habéis hecho llegar por algún medio a los verdaderos RAMMSTEIN? Sí fuera así, ¿cuál fue su respuesta?
David: Pues la verdad es que no. A veces nos preguntamos si sabrán de nosotros: en una ocasión salimos en un periódico potente en Alemania (el Süddeutsche Zeitung), donde nos hicieron una pequeña entrevista. Incluso en un concierto, no me recuerdo dónde, conocí a una persona que dijo que su tía era vecina de Paul Landers y que le hablaría de nosotros. Si fue así, espero que le diera un Like a alguno de nuestros vídeos de YouTube [risas].
Erik: [risas] Yo creo que si alguien de Rammstein ve nuestros vídeos se le dibujará una sonrisa y dirá «¡ay, qué cuquis!». Para ellos será como cuando ves a un perro andar sobre sus patas traseras: lo intenta, no lo hace tan bien como tú, pero sorprende que pueda hacerlo [risas]. No, en serio, creo que les haría gracia. Y, al menos por su parte, no creo que nos reclamasen nada. Otro asunto ya es la discográfica que los lleva.
¿Cuáles son vuestros planes futuros y vuestro objetivo más ambicioso como banda?
David: Nuestros planes son llegar a las ciudades donde la gente nos pide que vayamos y seguir mejorando nuestro show. ¿El objetivo más ambicioso?, conseguir tener un escenario espectacular con sus correspondientes efectos pirotécnicos: si eso ocurre significará que lo habremos hecho bien.
Erik: 100% de acuerdo con lo que dice David. Y, a ser posible, que la legislación española sobre pirotecnia para espectáculos fuese algo más permisiva para poder utilizar efectos más complejos y sofisticados (lanzallamas, por ejemplo) en espacios abiertos y cerrados. No sé, nuestro objetivo principal siempre ha sido acercar la música y el show de Rammstein a las ciudades que no tienen el privilegio de verlos en directo. Si hasta ahora hemos podido hacerlo ha sido gracias al público y a todos los que nos han ayudado. Mientras toda esa gente siga ahí, podemos seguir haciéndolo y no hay nada más que pedir.
Meinstein són muy cercanos y profesionales.