Crónicas

HAMLET + INFERNOISE – SALA DEVIZIO, ZARAGOZA – 08/01/10

por metalcry · 09/01/2010

Primer concierto del año de la gira de Hamlet de este año. En este caso estaban acompañados por Infernoise, y nos acercamos a la capital maña a disfrutar de un gran concierto.

Menudo día el elegido, ya que hacía un frío escandaloso en Zaragoza. Además gran parte de la geografía nacional estaba en alerta por la nieve, pero a nosotros nos dio igual por que sabíamos que los madrileños iban a subir la temperatura de la sala por enteros.

Se abrió la sala con casi una hora de retraso, lo que a la postre influiría en la duración final del concierto. Afuera, como hemos dicho, mientras esperábamos, hacía bastante frío que, unido al viento que soplaba la sensación era mayor. Pero una vez dentro ya nos olvidamos de ello.

Salieron en primer lugar INFERNOISE. El cuarteto, ya veterano, salió dispuesto a ganarse al público congregado, que en esos momentos de la noche, y debido el retraso estaba en tres cuartos de los que al final nos congregamos. Un retraso en el comienzo que finalmente fue de cuarenta minutos.

Su sonido contundente y cañero nos cautivó. Fueron de menos a más ya que al principio la gente estaba extrañada con lo que se escuchaba, y por que muchos no los conocían. Su música de estilo Pantera, claramente influenciados por los americanos parece que gustó. Arrancaron con la canción que da el título a su disco “The Chainsaw Law”. Hay que decir que cantan todas sus canciones en inglés, pero eso no es impedimento alguno para que pudiéramos disfrutar de su show.

Temas con una buena duración que fueron cayendo ante el público presente que poco a poco iba entrando a disfrutar en los temas. Sus cuatro componentes lo dieron todo para agradar en la fría noche zaragozana.

El escenario no era muy grande, pero suficiente para que disfrutaran tocando temas como “alive or dead”, “Helltrain”, o la que para mi fue mi favorita: “Crossing the Valley of death”. Esta canción tiene un estribillo muy pegadizo, y es muy distinta a ese estilo Pantera al que hemos hecho referencia.

Nos sorprendieron siguiendo con una versión de los Mötley Crüe, como fue “Wild Side”, muy bien interpretada en su estilo y que gozó de gran aceptación. Siguieron con “All my rage”, “Ritual” y tras unos toques de “Walk” de Pantera entre otras, trataron de acabar con “Helrider”, pero…los allí presentes quisimos más, aunque se fuera pasando la hora, y tras un momento de decisión nos deleitaron con un clásico, en este caso una versión de Iron Maiden, su temazo “Aces High” tras cincuenta minutos de una actuación a la que no hay que poner ni un solo pero.

Y es que teniendo en sus filas a un guitarrista como Ix Valieri, procedente de Ángeles del Infierno, al Sr. Nitro, que con menos de 25 años ya ha grabado 3 discos, Scorpion, nuestro bajista procedente de tierras azteca, y a las voces Rown Holand, se les augura un muy buen futuro por delante. Además que están componiendo para su segundo disco, y tienen el privilegio de acompañar a Hamlet en la mayor parte de su gira.

Tras un descanso, lo justo para hacer el cambio de un grupo a otro, y con un retraso considerable, salía al escenario Hamlet. Era su primer concierto del año de la gira de presentación de su fabuloso disco “La Puta y El Diablo” y venían con hambre de directo y de reventar la sala en un día tan frío. Y vaya que si lo consiguieron, pese a que finalmente no se llenó, aunque eso en las primeras filas no se notó. Había ganas de ver a Hamlet en Zaragoza.

Tras una breve intro salieron al escenario con la fuerza y las ganas que acostumbran, aunque quizás más, o al menos es lo que me pareció, ya que desde el primer tema salieron a dejarse la piel y disfrutar del concierto, a darlo todo, con ese agradecimiento que tienen hacia los fans. Y es que después de tantos años Hamlet sigue siendo un referente nacional, y el haber fichado por una compañía como Roadrunner parece que les ha dado una dosis de motivación y un punto extra en sus conciertos. Además que el tener a un guitarrista como Alberto Marín ha hecho que su directo sea aún más potente si cabe que el que tenían en el pasado. Además su sonido es compacto, sin fisuras, contundente y que gusta entre los fans del género.

Comenzaron con un tema de su nuevo disco, “El Hábil reino del desconcierto”, que nos hacía presagiar lo que iba a ser el resto del set que iban a descargar durante la hora y cuarenta minutos que les dejaron estar sobre el escenario.

Casi sin respirar seguimos con “Vivir es una ilusión”, y después un clásico como es “Tu Medicina”. No paraban. Luis Tárraga y Alberto Martín junto con Alvaro Tenorio, eran pura caña, y con un Molly al micro, entregadísimo durante toda la actuación. Sacó además su microfóno de gala, el de las calaveras, algo espectacular. Y Paco a la batería, un fenómeno, ya que pese a ser el que es más de apariencia tranquila, es una máquina en la batería. Además la sala invita a que el contacto con el público sea mayor, y más comunicativo. El sonido fue bueno en líneas generales, aunque si estabas en primera fila te podías perder un poco.

“Tortura-visión”, de su aclamado disco “Insomnio”, cayó de las primeras, para dar paso a “La tentación”, otro tema del Cd con el que están haciendo esta exitosa gira., que además le siguió otro tema del disco, en concreto el último: “Sacrificio”. “Egoísmo” es otro tema que no puede faltar, al que le siguió la clásica “Irracional”, coreada y bien movida por Molly y por todos los que estábamos disfrutando.

Y llegó el momento de hacer un breve parón para tomar aire y tener un poco de tranquilidad con “No habrá final”, el cual tiene una parte instrumental muy adecuada para ese pequeño intermedio que se dio Molly. Los demás por supuesto estaban en el escenario tocándola y él aprovechó para cambiarse de camiseta.

Las siguientes canciones que tocaron fueron las pertenecientes al álbum “Syberia” y que fueron aclamadas como prácticamente todas durante su actuación. Interpretaron “Para toda una vida” e “Imaginé”, para seguir con un clásico en su repertorio como fue “Antes y Después”.

Cuando sonaron los primeros acordes de “Denuncio a Dios”, el delirio de la sala era total, pensábamos que esto no se iba a acabar, ya que la intensidad del concierto fue total, con los Infernoise en la primera fila apoyando a sus colegas, que enlazaron las últimas canciones casi sin pensar, para tratar de acabar el set previsto, debido a que por haber comenzado con retraso ya nos habíamos pasado de la hora prevista de finalización, que era para las doce de la noche.

Se avisó a Hamlet de que debían parar en cuanto tocaran 2 temas más, pero ellos trataron de hacer todo su set, pese a que nos íbamos de tiempo. “Dementes, Cobardes” y su exitazo “Jodido Facha” pusieron el broche de oro. En este último tema, subieron a hacer los coros Infernoise, convirtiendo el concierto en casi una fiesta entre amigos, ya que se llevan muy bien, y se les nota. Además estaban gozando a más no poder, y cuando iban a tocar el último tema, les cortaron el sonido. Y es que la policía estaba afuera haciendo mediciones, y para evitar una posible sanción decidieron cortar.

Molly, a viva voz, agradeció a todos los allí presentes su asistencia, además de corear una y otra vez la última canción y pedir la gente que botáramos todos los allí presentes. Poco más se pudo hacer, y como colofón, además de dar las gracias, sacaron unas fotos desde el escenario con la gente por detrás, y ya sólo quedó la despedida.

Muy buen concierto, empañado por ese corte por motivos legales, y ajenos a la sala, que hay que comprender, pero es que habiendo empezado tarde, se acaba tarde. Pero lo más importante es que parece que el cambio de año les ha sentado muy bien a Hamlet, y más viendo lo que se les avecina durante esta primera mitad de año, desde tocar en Londres, hasta participar en una minigira nacional con Sepultura. Además tenían que emprender camino a Bilbao, pues al día siguiente tocaban en el Kafe Antzokia, y la climatología era adversa, pues fue un fin de semana de unas grandes nevadas. Afortunadamente pudieron llegar a Bilbao y tocaron, también con el éxito que les caracteriza en la capital vizcaína. Por cierto, para los que les gusta el marujeo, decir que si, que acudió una espectadora de lujo, como fue la pareja de Molly, la famosa presentadora de TV Pilar Rubio.