VAGOS OPEN AIR 2015 – VAGOS, PORTUGAL – DOMINGO 9
Y para terminar un baño de sangre
Un nuevo amanecer en Portugal y todo listo para afrontar la tercera y última jornada de festival. Hacía más calor que en los días anteriores y en nosotros se había implantado esa curiosa sensación en la que uno está ansioso por ver a los grupos del día y regresar después a casa, pero al mismo tiempo no quiere que terminen las actuaciones (¿o es que solo me pasa a mí?) En cualquier caso, llegó la hora.
Domingo 9
Tercer y último día para el festival portugués. La segunda jornada había sido realmente intensa y cargada de grandes actuaciones y el cierre del festival prometía no quedarse atrás. Las bandas de renombre comenzarían a ocupar el escenario muy pronto, pero los primeros en hacerlo serían los portugueses MIDNIGHT PRIEST, una banda procedente de Coimbra que presenta un heavy metal de corte tradicional, con influencias de la NWOBHM, con JUDAS PRIEST como una influencia muy relevante. Su sonido, con temas como “Thunderbay”, “Hellbreaker” o “Made Of Steel” recuerda a la corriente revival del metal clásico que tantos buenos momentos nos ha dado desde tierras escandinavas. Fue una buena inauguración para esta tercera jornada.
El estilo de los siguientes en subirse al escenario poco o nada tiene que ver con sus predecesores. Los australianos NE OBLIVISCARIS presentan un sonido actual y potente con influencias progresivas que les ha valido hacerse un nombre bastante respetado en la escena a pesar de ser aún una banda joven. Aparecieron sobre las tablas a pleno sol y con un viento que se llevaba el sonido, ya de por si no muy bueno, lastrando la actuación de los austriacos. Una parte importante del éxito de NE OBLIVISCARIS está en sus melodías y desafortunadamente las condiciones impidieron que temas como “Devour Me, Colossus (Part I): Blackholes”, “Of Petrichor Weaves Black Noise” o “Painters Of The Tempest (Part II): Triptych Lux” pudiera lucir en su máximo esplendor. No obstante la banda se mostró compenetrada y llena de energía, con muchas ganas de gustar a un público que fue acercándose a medida que avanzaba la actuación. Dispusieron de una hora sobre el escenario, en la que además de los tres ya mencionados pudieron interpretar los temas “Pyrrhic” y “And Plague Flowers The Kaleidoscope”, dejando una sensación agridulce por una buena actuación lastrada por un mal sonido.
Tras la presentación de NE OBLIVISCARIS a todos los asistentes nos tocaría caminar por el tablón ante la salida de los ingleses ALESTORM. Los piratas escoceses entraron en el cartel sustituyendo a HALESTORM y se presentaron en el escenario de Vagos como una de las actuaciones más esperadas del domingo, arrancando su setlist con “Walk The Plank”, una celebradísima “The Sunk’n Norwegian” y “Shipwrecked”. La banda se mostró muy comunicativa con el público y tuvo siempre en primera línea su característico humor, empezando por un backline con dos “ducknanas” (plátanos-pato) piratas.
Con Christopher Bowes al frente de la banda ocupándose de las voces y los teclados, ALESTORM continuaron ofreciendo su divertida apuesta de heavy metal a través de temas como “Magnetic North”, “That Famous Ol’ Spiced” (realmente divertida), “Nancy The Tavern Wench” (desde mi punto de vista, uno de los momentos álgidos del show), “Keelhauled” y una muy bien recibida “Rumpelkombo”.
La banda disponía de una hora sobre el escenario y estaba decidida a sacarle provecho. Al día aún le quedaba bastante luz y hacía calor, pero eso no impidió que temas como “Wenches & Mead” o “Drink” levantaran una verdadera fiesta entre el público, que vitoreó y disfrutó con la banda hasta el final del setlist, que se cerró con “1741 (The Battle Of Cartagena)”, “Captain Morgan’s Revenge” y “Rum”, dejando buenas sensaciones por parte de la banda británica y el ambiente listo para lo que estaba por venir.
Y lo que estaba por venir eran ni más ni menos que los israelíes ORPHANED LAND, que se presentaban sobre el escenario de Vagos dispuestos a seguir escalando puestos en una escena en la que merecerían un estatus mucho mayor. Su personal propuesta no deja indiferente a nadie y les convierte en una de esas bandas que amos u odias. El caso es que Kobi Farhi y los suyos se subieron a las tablas y comenzaron a presentar temas como “All Is One”, “Barakah” o “The Kiss Of Babylon (The Sins)”, dejando claras muestras de diversidad sonora y de la excelente banda que son sobre el escenario, mostrándose muy cercanos al público y buscando siempre divertir sin perder de vista el importante mensaje y objetivo de su música.
Con su vocalista y frontman tan elocuente como siempre, ORPHANED LAND ofrecieron cortes como una coreada “The Simple Man”, “Birth Of The Three (The Unification)”, “Olat Ha’tamid” o una intensa “Let The Truce Be Know”, que se cuenta entre mis favoritas de su actuación. El público se mostró entregado y tanto nuevos como viejos fans fueron metiéndose en la dinámica y la fiesta que supone un concierto de ORPHANED LAND, ayudados por temas tan propicios para corear, saltar y vitorear como la festiva “Sapari” (convertida ya en todo un clásico del grupo) o una imprescindible “Ocean Land (The Revelation)”.
La banda continuó avanzando hacia el final de su actuación con “In Thy Never Ending Way” y se despidió del público con su cierre habitual y uno de sus mayores clásicos (especialmente en directo), la festiva “Norra El Norra (Entering The Ark)”, que puso a todos los asistentes a botar y cantar junto a la banda y dejó así una actuación muy meritoria.
La recta final del festival se iba acercando y llegaba el turno para uno de los cabezas de cartel de la edición y de esta tercera y última jornada, los thrashers OVERKILL. La banda comandada por Bobby Blitz es muy querida y respetada entre los fans del género y sus trabajos más recientes han sido recibidos de forma excelente por la comunidad, convirtiéndoles en una de las actuaciones más esperadas y celebradas. La banda salió al escenario con un setlist que aunaba tanto material clásico como nuevo, repasando una carrera llena de éxitos de la que sonaron temas como “Armorist”, “Hammerhead”, “Electric Rattlesnake” o “Powersurge”, arrancando el setlist de forma directa y sin paños calientes.
Bobby es un gran frontman y aunque los años no perdonan sigue sabiendo como mover bien al público. El vocalista abandonaba el escenario frecuentemente, dejando a los instrumentistas en solitario, y regresaba como un torbellino a completar sus estrofas o interactuar con el respetable, que celebraba temas como “In Union We Stand”, “Rotten To The Core”, “Bring Me The Night”, una excelentemente bien recibida “End Of The Line” (de las mejores de su concierto) o “Necroshine”. La banda se mostraba compenetrada y en forma y los moshpits y el crowdsurfing expresaban el excelente estado de humor del público frente a su actuación.
Los alemanes dispusieron de alrededor de hora y media sobre las tablas, lo que les permitió perfilar un setlist muy completo en el que no faltaron cortes como “Horrorscope”, “Hellor From The Gutter” o la homónica “Overkill”. La noche se había cerrado sobre nosotros y la banda seguía avanzando en su empeño por convertirse en una de las actuaciones más celebradas del festival. Pese a ello, el tiempo seguía avanzando y la actuación entraba en su recta final con los temas “Ironbound”, “Bitter Pill” y “Elimination”, que dejaron al público preparado para recibir el broche final en forma del tradicional cover de THE SUBHUMANS “Fuck You”, que puso el punto y final al paso de OVERKILL por el escenario de Vagos.
Y tras ellos había llegado el momento de disfrutar de la que probablemente fuese, para mi gusto, la mayor atracción del cartel: BLOODBATH. La banda de death metal formada por Anders Nystrom, Jonas Renkse, Martin Axenrot, Per Eriksson y su nuevo vocalista Nick Holmes llegaba como una de las propuestas más interesantes del cartel. La banda, debido a los compromisos de sus integrantes, no suele girar y solo puede vérsela en festivales tras la salida de alguno de sus álbumes, lo que convertía este concierto en una ocasión especial. El grupo comenzó con “Let The Stillborn Come To Me” y “Mental Abortion” lo que sería un derroche de energía, intensidad y brutalidad hecho concierto.
Las principales dudas acerca de la banda radicaban en la persona del vocalista Nick Holmes y debo decir que quedé muy satisfecho con su actuación. Es cierto que Nick no se mueve mucho sobre las tablas, pero su desempeño vocal fue realmente bueno, a pesar del imperdonable detalle de no saberse las letras. Sin embargo a medida que avanzaba el setlist la gente fue metiéndose más en uno de los conciertos más salvajes del festival gracias a temas como “So You Die”, “Breeding Death”, “Anne” o “Cancer Of The Soul”, que empujaron al público a un frenético headbanging y avivaron al máximo los circle pits y el crowdsurfing.
Con la furia de BLOODBATH desatada sobre el escenario resultaba imposible resistirse al empuje de temas como “Weak Aside”, “Soul Evisceration” (de mis favoritas), “Unite In Pain” o “Like Fire”, que disfrutaron de un buen sonido y demostraron porqué la banda goza de un estatus tan prominente dentro de la escena. Antes de los bises el combinado tuvo a bien ofrecernos “Mock The Cross”, uno de los temas más potentes y directos de su anterior disco “The Fathomless Mastery” y una de mis favoritas. Tras un leve descanso, el grupo regresó al escenario para cerrar su actuación con dos esperados bises: “Eaten” y una celebrada “Cry My Name”, que cerraba salvajemente la actuación de los death metaleros.
La tercera jornada llegaba a su fin y solo quedaba por sonar el concierto de los locales IRONSWORD, que se subieron al escenario para satisfacer las ganas de los que aún quisiera un poco más de metal. Era tarde, el día había sido exigente y VAGOS OPEN AIR 2015 llegaba a su fin.
En resumen, solo puedo hablar de un excelente festival que sin lugar a dudas merece más atención de la que recibe, con un gran planteamiento de su recinto, con buenos servicios y al que solo le falta alguna zona de sombra adicional, tanto dentro como en la acampada (esta segunda la disfrutará pronto, cuando los jóvenes árboles esparcidos por ella crezcan un poco más). Sin lugar a dudas, volveré el año que viene.