METAL NORTE FESTIVAL – SALA TUNK, IRÚN – 4/10/2014
UN FESTIVAL QUE POCO A POCO SE HACE SU HUECO
Como cada año la gente de metal Norte ha vuelto a organizar su propio festival en la Sala Tunk de Irún, con un cartel digno de admirar, ASKI DA, DINKY DAU, DOMINIUM, LEIZE y LEO JIMÉNEZ. Una buena oferta musical, siguiendo la línea de ediciones anteriores apoyando a bandas de la zona e incluyendo otras con mucha más trayectoria y veteranía.
En primer lugar quería pedir disculpas a DINKY DAU y ASKI DA, porque me fue imposible llegar a ver sus actuaciones por problemas familiares. La actuación de DOMINIUM era muy esperada en su propio pueblo natal ya que reaparecían en los escenarios esa noche después de un largo parón, y así quedo reflejado en la respuesta del público. Toda la banda estuvo magnifica, con un Luis que no paraba de calentar a la peña en una noche de lluvia otoñal. “Alucinación”, “Mundo Oculto”, “Cruda Realidad” o “Sueño Eterno” fueron algunos de los puntos fuertes del show. Trash Metal a raudales, buena puesta en escena y muchas ganas de hacer gozar a sus pàisanos. Interesantes DOMINIUM.
Con poca iluminación y ya de noche comenzaron su actuación LEIZE. Este cuarteto venía a presentar su nuevo álbum en directo titulado “XXX” grabado en Madrid, y así empezaron a sonar “Sin Sitio”, con buen sonido que al final sería lo mejor porque el juego de luces brillo por su ausencia. También sonó “Y Otra Vez”, “Futuro Para Mi” y “Acosandome”, por supuesto hubo tiempo para las gracias y agradecimientos de Felix Lasa, un gran tipo, los solos de Patxi Carrasco, toques de bajo y ayudando en los coros de Toño y la fuerte pegada de Andoni que fueron acaramelando la velada.
A pesar de todo esto, el concierto se hizo muy corto y no se les puede achacar nada porque no faltaron canciones como “Egun Batean”, “Pideme”, “Heroe” o “Buscando … Mirando”. La banda de Zarautz se entrega en cada directo u eso es admirable. “Devorando las Calles”, “Muros y “Noche de Ronda” no podían faltar y sirvieron de colofón a una interesante actuación, dejando a la parroquia más que satisfecha.
El explosivo inicio de Leo Jiménez con “Vientos de Guerra” hacía prever que nuestro arsenal de adrenalina no sería capaz de aguantar durante todo el concierto el nivel de energía a desgastar. Para la segunda continuaba con su época en Saratoga de la mano de “Maldito Corazón”, la sala comenzaba a subir la temperatura. La banda se mantuvo a un alto nivel musical, al igual que Leo, su voz respondía como nos tiene acostumbrado. El de Fuenlabrada se encuentra en un momento de forma espectacular y sus fuerzas sobre el escenario aguantaron las dos horas del show que estaba previsto.
“Metal Warriors” de Manowar y “Domination” de Pantera fueron agasajadas como buenos himnos se merecen, puños al aire y gargantas al rojo vivo. Momentáneamente consiguieron que el poder que estos temas desprenden se hicieran notar en todos y cada uno de los allí presentes. La batería indestructible de Carlos Expósito, la potencia de Edu Fernández a las cuatro cuerdas o las efectivas guitarras de Rufo y Antonio Pino, volvieron a demostrar que gozan de un directo rabioso y potente, todo eso sumado a la voz de LEO, pues la banda se convierte en un torbellino en cada directo.
La actuación continuaba por sus derroteros, y temas como “Desde Niño”, “Condenados” o “Volar” sirvieron para agradecer de sobre manera el apoyo del público que conectó desde el comienzo con los músicos, no parando de espolearles con su entrega. Esa entrega consiguió que las dos siguientes, “Volver” y la cover de Mecano “Hijo de la Luna” pudieron mantener intactas las características que definen a la banda; intensidad, personalidad y destreza.
Leo Jiménez y sus amigos se tomaron el receso que precede a los bises, estos comenzaron con la nostálgica “Si Amaneciera” donde apareció algún que otro mechero. La puesta en escena de Leo es digna de un gran frontman que da más nivel vocal a cada tema que interpreta. Para ir concluyendo los bises la contundente “Resurrection” y “Tu Destino”, que no dejo de sorprendernos gratamente ya que Leo y sus compañeros están recogiendo los frutos sembrados hace mucho tiempo atrás en forma de aplausos y agradecimientos. Fuerza y honor.
Crónica y fotos: Dani Diez