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BETWEEN THE BURIED AND ME + HAKEN – SALA TAVASTIA, HELSINKI – 08/10/2015

por Emil Gil Bretón · 19/11/2015

El metal progresivo nunca morirá

Noche de metal progresivo en la ya fría ciudad de Helsinki. Con el nombre de «The Coma Ecliptic Tour II» llegaban a la capital finlandesa dos de las mejores bandas de metal progresivo de la actualidad: BETWEEN THE BURIED AND ME y HAKEN. Este concierto tenia un sabor especial, ya que se trataba de la ultima fecha europea de este pequeño pero interesante tour, y ello significaba que ambos grupos desplegarían su mejor y más potente arsenal de canciones. A continuación les contamos lo sucedido en esta inolvidable noche llena metal progresivo y avant-garde:

HAKEN

Los ingleses subieron exactamente a la hora estipulada (21:00) con una sala llena y hambrienta de buena música progresiva. Los HAKEN desde el primer minuto nos deleitaron con largos, complejos y magníficos temas llenos de improvisación, poderío y virtuosidad -y uno que otro intervalo instrumental-. Ross Jennings se mostró muy interactivo con el público presente, a la vez que se demostró en sobre manera sus excelentes dotes ovales, mientras la excelente sección rítmica de batería-bajo por parte de Raymond Hearne y Conner Green se acoplaban a la perfección a los prodigiosos riffs-solos de guitarra de Richard Henshall y Charles Griffiths, y los sonidos experimentales-melódicos de los teclados de Diego Tejeida. El público presente disfrutó como nunca y hasta sirvió de participe/colaborador para corear uno de los tantos épicos temas interpretado por el grupo. La actuación de los mismos tuvo una duración de 45 minutos en la que interpretaron un total de 5 estupendos temas: «Premonition», «In Memoriam», «Pareidolia», «Cockroach King» y «Crystallised». Increíble el desempeño de esta maravillosa banda sobre el escenario, la misma se presenta como una de las futuras promesas del mundo progresivo y como una poderosa fuerza. Al final se nos hizo muy corta la presentación de los ingleses HAKEN.

BETWEEN THE BURIED AND ME

A las 22:15 se apagan las luces y salen los esperados BETWEEN THE BURIED AND ME bajo la algarabía de los presentes. Dieron rápidamente comienzo a la actuación con el técnico y a la vez extremo tema «Selkies: The Endless Obsession» perteneciente a su tercer disco «Alaska» (2005, Victory). Los estadounidenses estuvieron encabezados por Tommy Giles Rogers, Jr en los teclados y voz, quien desplegaba una energía impresionante a la vez que saltaba por todo el escenario. A seguidas y sin tomar respiro el grupo continuó con el poderoso y progresivo tema «The Coma Machine» perteneciente a su más reciente disco de estudio «Coma Ecliptic» (2015, Metal Blade), y en los cuales pudimos ser testigos de la gran forma del baterista Blake Richardson, quien golpeaba sin piedad y con mucha precisión los tambores; y de la rapidez y los tonos bien profundos del bajo de Dan Briggs (en mi humilde opinión uno de los mejores bajista en la actualidad). Los sincompactos y pesados riffs de las guitarras de Paul Waggoner y Dustie Waring se conjugaban con las delicadas texturas de los teclados y efectos proporcionados por Rogers, Jr.

Posteriormente los BTBAM continuaron su perfecta actuación con un puñados de agresivos temas que además resaltaban esa parte agresiva, extrema y avant-garde que los destaca brillantemente del montón de grupos con tendencias similares, como si fuera una perfecta unión entre PINK FLOYD, DREAM THEATER y NAPALM DEATH: «Astral Body», «Lay Your Ghosts to Rest», «Memory Palace», «Famine Wolf» y «Ants of the Sky».

Finalmente, el grupo se despidió con el famosísimo tema del grupo QUEEN «Bohemian Rhapsody» bajo una eufórica sala. Los BTBAM interpretaron la operística pieza magistralmente, y de esta forma cerraron con broche de oro una excelente velada de metal progresivo. Los asistentes se quedaron pidiendo más y una sala Tavastia a máxima capacidad no se cansaba de aplaudir. El setlist estuvo compuesto de ocho temas la mayoría del ultimo álbum, y la actuación tuvo una duración en total de una hora y quince minutos. En conclusión, las actuaciones de las dos bandas fueron intensas y sin desperdicios: frescura progresiva y a modo de opera de los HAKEN; y perfección y mucho avant-garde extremo por parte de BETWEEN THE BURIED AND ME.