GRACE DISGRACED – ENTHRALLMENT TRACED

Crítica

Nada menos que desde Rusia llegan GRACE DISGRACED, una potente y rabiosa banda de Death Metal formada en 2004 y muy influenciada por grupos como CANNIBAL CORPSE o MORBID ANGEL. Después de varios cambios en su formación y de editar una demo, el pasado año vio la luz su primer disco de larga duración, “Enthrallment traced”, un álbum furioso y verdaderamente salvaje, que encantará a los amantes de los sonidos más bestias.

A pesar de que en un primer momento puede dar la sensación de que se trata de una música difícil de escuchar, una escucha más atenta nos permitirá darnos cuenta de que este grupo sabe muy bien lo que se trae entre manos, de forma que han dado forma a un sonido compacto que cristaliza en siete canciones cargadas de matices que merecen que les prestemos mucha atención.

La caña empieza con “Prophecy of somnambulist”, un tema que desde el principio no deja ni un momento de respiro, con un ritmo endiablado marcado por Andrey Ischenko y su batería. La primera vez que escuchamos la voz de Polina, nos puede sorprender el grado de agresividad que alcanza esta chica, con un gutural tan rabioso que parece que salga del mismísimo infierno. En lo que se refiere a la música, podemos apreciar muchos matices en el tratamiento de las guitarras por parte de Desil, con unos sonidos muy conseguidos y variados, que encajan a la perfección con los ritmos de la batería, contundentes pero muy variados, sobre todo al final, momento en el que el ritmo se ralentiza.

Unos sonidos difíciles de identificar enlazan “Prophecy of somnambulist” con la canción siguiente, “Hypocritical oath”, que desde el principio es velocidad pura, con una batería que suena atronadora. Sin embargo, lo que más llama la atención es la variedad de sonidos que obtiene Desil de su guitarra, que consigue crear un “colchón” perfecto para la voz de Polina, que canta con una brutalidad extrema.

To autumn” empieza con un riff muy reconocible, que encaja con el ritmo de la batería, contundente y poderoso. Es un tema potente, aunque no tan rápido como los anteriores, en el que el grupo, además de esa potencia, introduce cierta oscuridad en algunos momentos, enriqueciendo su sonido. Es una canción compleja, en la que podemos apreciar unos cambios de ritmo que nos pueden romper los esquemas por lo inesperados que son.

Con unos sonidos de guitarra muy densos empieza “Psycho cycle”, una canción que muy pronto se acelera para desarrollarse con mucha fuerza, con un ritmo no especialmente rápido, pero que sí nos obligará a hacer headbanging. Sin embargo, los cambios de ritmo que tiene hacen que sea un tema muy complejo, en el que el grupo deja entrever su versatilidad, ya que no se limitan a dar caña “a lo loco”, sino que dan entrada a sonidos más variados que completan la canción. El tema termina con los mismos sonidos densos con los que empezó, y también con el sonido del mar.

Sonido del mar que sirve para enlazar con el tema siguiente, “Adzhimushkai”, una canción que muy pronto se convierte en un tema de ritmo muy técnico y complejo, en el que se alternan momentos muy potentes con otros más densos. Las melodías y ritmos de la guitarra están muy conseguidos, y de hecho es en lo que más nos vamos a fijar, por encima incluso de la furiosa pegada de Ischenko a la batería. Por su parte, los cambios de ritmo sirven para dar más expresividad a ciertas partes del tema, ralentizándose o acelerándose en función de lo que se quiera transmitir. El tema termina con la guitarra sonando con mucha oscuridad.

Villain” empieza con mucha potencia, con un ritmo veloz y desenfrenado que no da ni un momento de respiro y en el que el sonido de la guitarra está muy conseguido. Polina canta con mucha rabia por encima de un ritmo muy contundente y de unas melodías de la guitarra repetitivas y casi hipnóticas a veces. Es el tema en el que mejor se aprecia el trabajo de los músicos, porque hay incluso un momento en el que podemos escuchar el bajo, que apenas se escucha en las demás canciones.

De nuevo, “Villain” se enlaza con el tema con el que termina el disco, “Orchids of the fallen Empire”, una canción potente, aunque no tan rápida como las anteriores. Por encima de un ritmo de batería muy contundente, Desil desarrolla unas melodías muy conseguidas con su guitarra, que arropan la voz de Polina, que canta con mucha furia. De hecho, es el sonido de la guitarra lo que más va a llamar la atención en una primera escucha, por lo variado y complejo que es. Además, pese a tratarse del tema más largo del disco, con casi ocho minutos, el grupo ha sabido hacer que no se nos haga largo, al introducir muchos cambios de ritmo.

Como vemos, con “Enthrallment tracedGRACE DISGRACED han creado siete canciones largas (la más corta tiene cinco minutos y casi todas duran más de seis), complejas y, sobre todo, furiosas, con las que dejan claro que lo que más les gusta es dar caña, pero que también saben muy bien como hacer que esas canciones sean mucho más que caña, introduciendo unos cambios de ritmo muy logrados.

No estamos ante el disco del año, pero sin duda, el trabajo de estos chicos es muy bueno. Esperemos que sigan por el mismo camino.

GRACE DISGRACED son:

Polina “Grace Dis” Berezko: Voz.
Alexandr “Desil” Klaptzov: Guitarras.
Andrey Andreev: Bajo.
Andrey Ischenko: Batería.

Track list:

1- Prophecy of somnambulist.
2- Hypocritical oath.
3- To autumn.
4- Psycho cycle.
5- Adzhimushkai.
6- Villain.
7- Orchids of the fallen Empire.

Discográfica: More Hate Productions.
Puntuación: 7/10.
Autor: Pablo Folgueira.

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