ENTREVISTA A LOS GUARDIANES DEL PUENTE
“Detrás de LGP hay un grupo de gente que trabaja, pero no por dinero, lo hacen porque creen en el proyecto”
LOS GUARDIANES DEL PUENTE es un nuevo proyecto formado por tres veteranos músicos de la escena metalera catalana: Joan Cardoner (ex-TERRATRÉMOL, CARDONER…), Quim Mandado y Martín Rodríguez (ambos ex-SANGTRAÏT). Aprovechando que se encuentran en pleno proceso de producción de lo que será su primer disco, me desplacé hasta Figueres para que me contaran a cerca de sus planes de futuro, sus experiencias pasadas y muchas más cosas interesantes que podéis leer a continuación.
¿Qué tal fue el primer concierto de LOS GUARDIANES DEL PUENTE en La Mirona, de Girona?
Joan: Bien, muy bien.
Quim: Fue una toma de contacto bastante positiva. Hombre, siempre va bien porqué, aunque nos conocemos muchísimo, siempre ves cosas nuevas encima del escenario.
Martín: A mi me fue bien para romper el hielo. Hacía diez años que no subía a un escenario y dije, ostia, a ver que tal, ¿no?
¿Diez años?, si el último concierto con SANGTRAÏT fue en 2001.
Martín: Bueno, desde el 2001. Ah, no, no… Que entonces hicimos aquel concierto allí en Figueres. Del 2001 hacia aquí dos veces he subido…
Joan: Tú subiste al escenario el día de mi boda. En un bareto al que fuimos después. Fue en 2004. Imagínatelo con traje y corbata. (Risas)
Hacía muchos años que no tocabais los tres juntos ¿verdad?
Quim: Bua! Hace casi treinta años. (Risas)
Martín: En el 87 o por ahí. Nos llamábamos MYSTIC. También nos acompañaba Coromines. Después se rompió MYSTIC y nosotros (Martín, Quim y Coromines) hicimos SANGTRAÏT. Entonces Joan formó TERRATRÉMOL.
Joan: Siempre hemos estado muy unidos pero, profesionalmente, haciéndonos la competencia.
¿Qué os ha llevado a la reunión tras tantos años?
Joan: Pues porque Martín y yo queríamos hacer este grupo y necesitábamos un bajista. En principio contamos con uno que tenía yo contratado para grabar mi cuarto disco pero la cosa no acabó de funcionar. Entonces llamamos a nuestro hermano Quim para que nos echara una mano.
Quim: A mi me avisan una semana antes de entrar a grabar. (Risas)
Y después del concierto, ¿Qué tal la crítica del público? ¿Tuvisteis contacto con la gente?
Joan: Con la gente sí. Tuvimos que salir a hacernos fotos y a firmar unas postales que teníamos.
Martín: La respuesta de la gente fue muy buena.
Joan: Pues sí, la verdad es que estuvo muy bien.
O sea que había ganas de veros a los tres juntos después de tantos años. ¿Tocasteis alguna versión o algún tema de vuestras bandas anteriores?
Martín: Hicimos dos temas de SANGTRAÏT, “El vol de l’home ocell” y “Els senyors de les Pedres”. Siempre te las piden, ¿sabes? Nosotros queremos tocar los de Los Guardianes, que es el grupo que tenemos actualmente. Pero claro, quieras o no, la gente… Es normal, tú.
¿Quién cantaba, Quim?
Joan: Los de SANGTRAÏT los cantó Quim. Pero el cantante de Guardianes soy yo. Lo pasé pipa tocándolos. Estaba Coromines de SANGTRAÏT entre el público y yo estaba tocando el tema y le hacía: Que? Eh? (Gestualiza desafiante) (Muchas risas)
¿Se te propuso ser el cantante de Guardianes en alguna ocasión, Quim?
Joan: Ya sabíamos que Quim no quería cantar. A parte que ya teníamos un cantante mucho mejor. (Muchas risas)
Martín: Yo, hace tres o cuatro años que voy detrás suyo para hacer un grupo y que cante él. En principio no lo entendía. Pero me dijo que si tenía que cantar y tocar a la vez no podía disfrutar con el bajo. Finalmente lo comprendí.
Quim: Yo me conozco, soy muy neurótico. Para estar todo el rato pendiente de las letras, que si ahora me duele la garganta, que ahora no se que… yo canto dos días seguidos y me resiento en seguida. Joan canta diez días seguidos y no se entera, tiene la voz resistente.
Debes haber educado la voz, ¿no Joan?
Joan: No, únicamente he estudiado piano solfeo y guitarra. Aprendí mucho con la orquesta de baile y también haciendo los coros de TERRETRÉMOL. Allí aprendí a controlar las notas y la voz. Me puedo quedar afónico fácilmente, pero por naturaleza me recupero muy rápidamente. La voz es lo único que no he estudiado.
¿Alguna colaboración especial sobre las tablas de La Mirona?
Joan: No, en el concierto no. Pero en el disco vino Coromines a hacer un solo y también me ayudó con las armonías y cosas así, para liberarme un poco de tanta faena.
Y en un futuro, ¿Pensáis llevar algún tipo de apoyo en directo, ya sabéis; guitarra rítmica, teclista…?
Joan: Nuestro técnico, Alex, dijo, allí en La Mirona, que la cosa sonaba bastante compactada.
Quim: ¿Sabes que pasa? No conocemos a ningún teclista que esté tan loco como nosotros. (Risas)
Martín: En principio vamos a ser nosotros tres. Piensa que es un proyecto que ocupa mucho tiempo y no todo el mundo quiere comprometerse a salir de gira, dejando hijos, mujer, trabajo…
Es que no todo el mundo lo tiene tan claro como vosotros, sobretodo los que comienzan, si han de decidir entre la carrera de músico o su trabajo…
Joan: Tu fíjate que las bandas que más funcionan en este país son de tíos de 45 hacia arriba: SARATOGA, OBÚS, MÄGO DE OZ, MEDINA AZAHARA, LUJURIA… Piensa que yo ya tengo la vida, más o menos solucionada, familiarmente y de trabajo. Ocurre eso, que los chavales jóvenes no pueden desplazarse y tal.
Lo que veo es que la industria no es como tiempo atrás. Antes un grupo sacaba disco con una discográfica y tenía unas garantías de hacer carrera y seguir adelante. Ahora no se la pueden jugar tan a la ligera, ya que está el tema de Internet y las descargas ilegales…
Quim: Todo este negocio musical debe cambiar. Antes, las discográficas te pagaban el disco, luego, también es verdad que ellos se llevaban el 90% de los beneficios y tú te quedabas con una ganancia ridícula. Los que salen perdiendo con internet son las discográficas.
Joan: Ahora, la figura clave es el manager. Mucho más importante que la discográfica. Hoy en día con Spotify la gente tiene acceso a la música fácilmente. Creo que estamos volviendo a los orígenes, cuando un manager te cogía y te vendía como quien vende un florero. Las grandes bandas, gente como METALLICA, MAIDEN y tal, alquilan un estudio, graban el disco y dicen: “tenemos esto ¿Quién lo quiere?”.
Martín: Nosotros nos ganamos la vida como podemos, un grupo ha de darse a conocer encima del escenario, pero no podemos estar fuera tres meses de gira como hacen estas bandas. Como mucho el fin de semana. Internet puede estar mal para unos y bien para otros. Pero, los que realmente quieran trabajar como nosotros, cogiendo bocadillo y furgoneta, estarán de acuerdo. Los que son cómodos y solo quieren vivir de la venta de discos, estarán en contra.
Joan: El gran problema con internet lo tienen los compositores que venden canciones a otros. Si esas canciones no generan derechos de autor, estos tíos se mueren de hambre. Si Guardianes fuera el disco más descargado del 2010, para nosotros sería un beneficio. Ahora, si la discográfica se ha gastado una pasta en el disco, es una putada para ellos. No se, quizás tendrían que poner los discos más baratos.
Quim: No creo que sea un problema de discos baratos. Es ya por costumbre. La gente se lo baja en lugar de comprarlo.
Por cierto, ¿Qué habéis estado haciendo todos estos años hasta vuestra reaparición con LOS GUARDIANES DEL PUENTE?
Martín: Yo he montado una empresa de transportes para poderme pagar este disco que estoy haciendo ahora, porque ya se que con la música no voy a comer, ya te lo digo.
En una entrevista que os hicieron hace años, recuerdo que el entrevistador te decía que tenías un camión muy lujoso…
Martín: Si lujoso, tenía que pisar el embrague cuatro veces para meter la marcha. (Risas)
Para que veas, la gente se cree que por el hecho de ser músico de heavy metal y sacar discos, los euros caen del cielo.
Martín: Estuve seis años trabajando de Lunes a Domingo, sin vacaciones ni navidades tío. Con un camión que casi me mato varias veces. No ha pasado nada porque debo tener alguien que me cuida. Tú dirás, me metí en un trailer sin tener ni idea! De las cuatro a las diez de la noche, ¿cómo te lo explicas?
¿Eso fue cuándo acabó SANGTRAÏT?
Martín: Si, tenía dos soluciones, pensé; “O me olvido de la música por toda la eternidad o la guardo en un rincón del cerebro, en un cajón, y la cierro con llave para más adelante”. Se me metió en la cabeza de hacer algo para poder hacer música y para que me diera de comer. Ahora ha pasado tiempo y parece que lo he conseguido, he abierto el cajón y parece que la música empieza a salir, junto con estos dos.
Quim, tú también te has dedicado a la producción de discos ¿no?
Quim: Sí, estuve produciendo unas bandas allí en Sant Climent. Grabé un disco en solitario; “Eclosió” se llamaba y después entré a dirigir la coral de La Jonqueray a dar clases en una escuela de música. Yo me dedico a la música.
¿De bajo o de canto?
Quim: Clases de bajo, batería y guitarra. Polifacético… (Muchas risas)
¿Y tú, Joan?
Joan: Yo hacía discos.
Sí, ya he visto que tú has ido haciendo carrera en solitario.
Joan: Sí, des del 99 hasta aquí. También lo he ido combinando con cosas como ROCKSON, con Martín.
¿Has aparcado tu carrera en solitario para dedicarte a Guardianes o compaginas las dos cosas?
Joan: Solo estoy con Guardianes. Es que no tengo más tiempo, esto me da mucho trabajo.
Quim: Martín le robó las canciones a Joan. (Risas)
Joan: Yo estaba haciendo un cuarto disco en solitario y Martín me vino a buscar.
¿Entonces has aprovechado tus temas para Los Guardianes?
Joan: Es evidente que yo tenía algunas ideas y temas hechos pero pensé que sería bueno que cada uno pusiera su instrumento. Digamos que yo soy el compositor y estos dos los mandan a la mierda. (Muchas risas)
Martín: Si cada uno pone su instrumento hará suya la canción porque pondrá el corazón, ¿Entiendes? Si a mi me dicen lo que tengo que tocar, aunque me paguen, prefiero coger el camión y ponerme Jimy Hendrix.
Joan: Siempre he pensado que en un grupo no importa quien componga, lo importante es que todos trabajen. Pero piensa que si yo cogiera las riendas de Guardianes, solo sería CARDONER con otro nombre, no tendría esencia. Lo bonito es que cada uno ponga de su parte.
¿La temática de las letras hacia donde va? ¿Las has escrito todas tú, Joan?
Joan: Si. Son fantásticas… inventadas. De caballeros, de la inquisición, de vampiros. Lo que me gusta a mí, cosas góticas, medievales, por ahí va la cosa.
Tengo entendido que estáis grabando el disco en Sabadell. ¿Cómo lo lleváis? ¿Me podéis adelantar algún detalle: titulo, portada, número de temas?
Martín: Ahora se están haciendo mezclas, luego tenemos que hacer las audiciones, recordings… Únicamente esta grabado, llevará trece temas más un bonus track y la portada aún no la tenemos decidida.
Quim: El titulo aún no lo sabemos. Hemos dicho muchas paridas pero al final… (Risas)
Martín: Hay tres o cuatro nombres por ahí, pero falta decir: éste!
Quizás el nombre de alguna canción?
Joan: No, no. Ya lo hemos mirado, pero no. En cambio con mis discos tenía el titulo a la primera de cambio, tú. Si yo hubiera hecho un cuarto disco en solitario, el titulo sería: Made in Catalonia.
Martín: Pero vine yo y lo estropeé todo. (Risas)
¿Discográfica tenéis?
Joan: Jordi, nuestro manager, está buscando pero no encuentra ofertas serias en cuanto a distribución, implicación… ¿Sabes que pasa? Detrás de Guardianes hay un grupo de gente que trabaja pero no por dinero, lo hacen por que creen en el proyecto. Entonces él busca gente que se implique. Pero seguro que saldrá alguna, piensa que no hemos enseñado temas aún, de momento buscamos por el nombre del grupo y por quien somos. Si tú llevas el disco grabado, cualquiera te lo editará, pero luego lees las condiciones que te ponen y dices: iros a tomar viento! No podemos aceptar trato de principiantes. Un chaval que empieza, se grabará el disco, irá a la discográfica, le harán un contrato por cinco años y la mar de feliz… “Tío, la estás cagando! Estas vendido!”
Martín: Estamos cansaditos de que se lleven todo el dinero. No es que lo queramos todo, ni ir en Maserati, pero coño, la gente compra esto por nuestras ideas. Queremos vivir tranquilos, ensayar, promocionarnos, comer… Para el trato que nos dan algunas discográficas, ya me lo monto yo, solo hay que registrarse, pagar a hacienda y listo. El sello lo tenemos registrado hace años, cuando ROCKSON, por si en un futuro lo queríamos, pero hace falta una inversión de dinero que no tenemos, todo el dinero lo estamos destinando a la grabación del disco. Por desgracia la industria siempre ha ido a por el dinero y no a por la música.
Joan: Resumiendo, tampoco es muy urgente sacar disco, porque iremos a tocar a un bareto y sabemos que habrá gente. Hombre… si necesitamos un disco, pero prisa no tenemos.
Martín: La idea de un principio era salir a tocar sin disco.
Quim: Eso se hacía en los 60’s y 70’s. Cuando se grababa el disco, las canciones ya estaban rodadas. Según la reacción del público decidían: esta para el disco, esta no, cara A, cara B…
Pero no pensáis que la gente quiere ir a ver en directo lo que hay en el disco. Habiéndolo escuchado previamente pueden cantar las letras y ya saben por donde van los tiros.
Martín: Si, es normal… Pero a veces vas a ver un grupo sin conocer nada de ellos, como yo he ido, y te vas con aquella cosa; “Ostia, el tío cantaba así… un estribillo… voy a buscarlo a la tienda!”
También pasa que los discos se adornan demasiado en ocasiones y luego las bandas decepcionan en directo.
Joan: A mí a veces me pasan un disco y me dicen que es cojonudo, pero no me fío. En directo se demuestra lo que vale un grupo. En el estudio se pueden hacer mil historias; detalles, palancas por aquí, riffs… eso es un error. En cambio este disco está grabado como tocamos en directo. Para no engañar a nadie. Aquí están los errores de la tecnología.
¿Cada uno ha grabado por su lado o los tres a la vez como si de un ensayo se tratara, recreando esa esencia que tanto les gusta a muchos productores?
Martín: Cada uno por su lado.
Quim: Si yo cuando entré a grabar no me sabía las canciones. Las aprendí grabándolas. (Risas)
Eso también lo da la libertad que tenéis en el estudio. Si pagarais por horas no os lo podríais permitir.
Joan: Si bueno. El trato ya era ese, el tiempo es ilimitado. Sino nos costaría una fortuna. ¿Sabes que pasa? Los del estudio estaban flipando por el hecho que venían estos dos a grabar, eran ellos los que nos querían. Casi tenían que pagar ellos antes que nosotros.
Perfecto ¿Y de donde salió el nombre de LOS GUARDIANES DEL PUENTE?
Martín: Pues mira, como Joan ha dicho, él estaba preparando lo suyo y yo también preparaba lo mío. Entonces, yo tenía un camión que hacía tiempo que no caminaba. Le dije: “Joan tengo que sacar el camión a pasear, ¿Quieres venir? Y me dice: “Vale, vale, guay. Dónde vamos?”. Contesto: “No sé, da igual, el camión ha de hacer 19 o 20 kilómetros…”. Me propone de ir a Espolla, a su casa, para ver el estudio de grabación nuevo. De camino, llegamos a un puente, en una carretera estrecha. Resulta que a cada lado había un perro, cosas que pasan. Le digo: “Osti, Joan, mira. Los Guardianes del Puente, tío”. Y este me dice: “Esto es un nombre para el grupo ¿Te gusta?”. Y así lo dejamos.
¿Por qué no aprovechar un nombre conocido para el público como MYSTIC o ROCKSON y venderlo como un regreso soñado? Cosa habitual en nuestros días.
Martín: Bueno, porque la gracia está en hacerlo todo de nuevo. Ese es nuestro reto.
Hablando de nombres, decidme Quim o Martín, ¿Es cierto que antes de SANGTRAÏT os llamabais BOMBEROS ATÓMICOS?
Quim: Si, es cierto. Esto venía, porque nos hicimos bomberos para poder pagarnos los instrumentos. No se si era nuestra culpa, pero enganchamos todos los fuegos que había, tío. Se quemó todo. (Muchas risas)
Martín: Yo no estaba aún, entré cuando el batería se fue a la mili.
¿Por qué decidisteis cantar en castellano?
Joan: Porque yo me siento más cómodo, simplemente.
¿No tenéis miedo de que se os crucifique en Catalunya por este hecho? Ya sabéis como es aquí la gente, en seguida se mezcla la política con la música por culpa del idioma.
Martín: Mucha gente dice que ya nos apañaremos, pero que no tendremos su apoyo y tal. Nosotros aceptamos a todo tipo de público, el que mezcle el rollo del idioma o la política es su problema.
Quim: Queramos o no, los humanos formamos parte de una tribu y cada uno es de su tribu. El público puede hacer lo que quiera, lo que nosotros no hacemos es mezclar música y política. Si yo tuviera que cantar, pues lo haría en catalán, simplemente porque me es más cómodo.
Ya para ir terminando, ¿Qué ilusiones hay depositadas cuando este nuevo disco salga a la luz?
Martín: Tocar! Ir a tocar des de la Jonquerahasta Sevilla. Ilusiones tenemos las mismas que cuando éramos jóvenes y ganas las mismas. Sabemos que es difícil ganarse la vida solo con esto… ya no hablo de ventas de discos, ni números 1 ni números 20 ni hostias. Con que nos ganáramos la vida y nos sacáramos un sueldo iría fantástico. O sea que no tenemos grandes pretensiones.
Joan: Viajar, tocar… sobretodo tocar… Es como ir de excursión a ensayar.
Hombre, ha de ser bonito que la gente de Sevilla, por ejemplo, os reconozca y os felicite por el disco…
Joan: Nos gusta el calor del público.
Martín: Eso es lo que nos queda por vivir. Siempre hemos tocado en escenarios grandes y el contacto físico ese mientras tocas queremos sentirlo.
Aprovechando tú respuesta, ¿Qué es lo más grande que habéis hecho en vuestra carrera musical? Supongo que aquel memorable 14 de Junio del 91 en el Palau Sant Jordi.
Quim: En local cerrado sí. En aquella época llenábamos campos de fútbol y tocábamos mucho.
Martín: Una vez, en el parque de la Ciutadella, habían cien mil y pico de personas. Tocaban muchos grupos.
Ahora que lo estáis mirando des de la barrera, ¿no sentís añoranza de todos aquellos conciertos y del éxito?
Martín: Teniendo la ilusión y las ganas y las posibilidades, físicamente, que tenemos con la edad que tenemos, pues no… Ayer fue ayer y hoy es hoy.
Quim: Todo eso ya lo tenemos, es un poso. Y ganas de hacer, todavía tenemos más. No hace falta que sean cosas tan grandes.
Martín: Nosotros eso lo vemos diferente que vosotros. El público está ahí y piensa: “Osti, ¿qué piensa esta gente de esto?”. Nosotros, como lo hemos vivido, lo consideramos una cosa que ya está atrás… No olvidarla, por supuesto. Y ser conscientes de que lo que hemos hecho antes… gracias a aquello, ahora tendremos algunas puertas… Eso está clarísimo, ¿no?
Joan: Todo eso ya lo hemos hecho, hoteles, giras… ya hemos sido rock-stars. (Risas)
Martín: Y tampoco cosas para impresionar a la gente, sino simplemente lo que nosotros sentimos. Para nosotros, la música es un sentimiento. Y lo sentimos de una manera determinada. Yo toco un instrumento, y él toca otro y él toca otro. Entonces, nos combinamos nuestros sentimientos. Y nos juntamos y hacemos una cosa. La ilusión, pues sí, esperamos que guste, que vaya bien y que nos podamos ganar la vida con esto. Tampoco quiero ningún Maserati.
Perfecto chicos, ha sido un verdadero placer charlar con vosotros, ha pasado la tarde casi sin darme cuenta y debería regresar hacia Barcelona. Muchas gracias, Martín, por el café y por abrir las puertas de tu casa a Metalcry, eres muy amable.
Esperamos con ansiedad la publicación del disco y deseamos que podáis coger el bocadillo y la furgoneta, como dice Martín, para veros en plena forma encima de un escenario en breve. Aún os queda cuerda para rato! Mucha suerte Guardianes!