Te fuiste demasiado joven, Mr. Matos, pero ¡siempre estarás con nosotros!
Triste fin de semana para la parroquia metalera, ya que el pasado sábado, día 08 de junio, fallecía el vocalista brasileño André Matos, a causa de un paro cardíaco, a la temprana edad de 47 años.
Sin duda, se trata de una gran pérdida para el mundo del heavy metal, que deja escapar a una de sus voces más carismáticas y reconocibles. Se nos fue Manzano recientemente, se marchó Lemmy hace ya unos años… pero debo confesar que ninguna de esas pérdidas me caló tanto como la de Matos. Siempre con una sonrisa en el rostro, André me caía especialmente simpático. Por si fuera poco, era un ejemplo de elegancia sobre un escenario, así que se convertiría en uno de mis vocalistas favoritos.
A lo largo de todos estos años, Matos había sido voz y miembro fundador de bandas como VIPER, ANGRA o SHAMAN, lanzando su carrera en solitario a finales de 2006, con un meritorio “Time To Be Free”, publicado en agosto de 2007. Entre otros proyectos, como el espectacular debut de los SYMFONIA de Timo Tolkki, que llevó por título “In Paradisum” (2011), Matos también había colaborado con bandas como los reconocidos AVANTASIA.
Aunque totalmente infravalorado, “In Paradisum” significó un disco de power metal de garantías, descaradamente dedicado a aquellos nostálgicos que disfrutamos con discos como “Episode” (1996), “Visions” (1997) o “Destiny” (1998), de STRATOVARIUS, y que en otra época hubiera sobresalido sin ningún problema. Por otra parte, dos años antes, el vocalista había lanzado su segundo esfuerzo en solitario, de título “Mentalize” (2009), un nuevo larga duración que no acabó de estar a la altura.
En lo personal, tuve la ocasión de ver a Matos en directo en un par de ocasiones, si mal no recuerdo, ambas en la sala Razzmatazz II de Barcelona. La primera de ellas junto a AVALANCH, el 25 de mayo de 2003, presentando sus SHAMAN ante una escasa audiencia. Y es que cabe recordar que en aquella época los de Rionda habían cambiado media banda, dando un giro musical a su carrera, que no todos entendieron… Así que corrían malos tiempos para los asturianos.
Precisamente, André pone su voz a un fragmento del tema “Del Cielo a la Tierra”, perteneciente a “Los Poetas Han Muerto” (2003), disco que presentaba AVALANCH por aquel entonces, y, como no podía ser de otro modo, hizo que el brasileño se subiera a cantar, junto a Ramón Lage, uno de los mejores temas de ese disco. De hecho, Rionda nunca podrá negar la influencia de ANGRA en sus composiciones, sobre todo en la incorporación de percusiones, cosa que les ayudó a destacar entre los demás grupos españoles.
En cuanto a SHAMAN, en este caso, presentaban su debut “Ritual” (2002), con una banda que en su haber integraba hasta tres miembros de ANGRA: el batería Ricardo Confessori, el bajista Luis Mariutti y el propio André Matos. Evidentemente, temas como “Carry On” o “Nothing to Say”, de su anterior etapa, no faltaron, así como el imprescindible “Fairy Tale”, la espectacular balada de “Ritual”, con Matos a la voz y al piano.
Pasaron los años, y el “Tinnitus Sanctus Tour 2009” trajo nuevamente al bueno de André a Barcelona, ahora ya como artista solista. Fue un 18 de enero de 2009 y, al contrario que la primera vez con SHAMAN, ahora sí estaba la sala a reventar. El cartel lo valía, ya que HEAT y EDGUY acompañaban al brasileño en aquella ocasión.
El carismático frontman regresaba nuevamente acompañado por sus inseparables Luis Mariutti (bajista) y Hugo Mariutti (guitarra), viejos conocidos de sus anteriores bandas, junto con el guitarra André Hernándes, el teclista Fabio Ribeiro y el espectacular batería Eloy Casagrande, que por aquel entonces contaba con tan solo diecisiete años. Con una sala ya casi llena empezaba a sonar “Menuett”, a modo de introducción de lo que iba a ser un repertorio basado en temas de su primer trabajo en solitario “Time To Be Free”, como “Letting Go”, “How long” o “Rio”, más algunas sorpresas de ANGRA, como “Nothing To Say”, “Carry On” y la balada “Lisbon”, o la versión de JOURNEY “Separate ways”, incluida en la edición japonesa del mencionado “Time To Be Free”.
Y esto es lo más destacable que me viene a la mente cuando pienso en él y en su legado. Siempre ha sido un placer disfrutar de tu música André, ya sea en directo o a través de los altavoces. Te nos has ido muy joven, pero, allá donde estés, seguro que sigues deleitando a todos y a todas con tu gran talante. Nosotros no te olvidamos, tu música te hace eterno… D. E. P.