ENTREVISTA A JOHNNY B. NASTY
‘Y cada nueva generación que surge, está más involucionada que su predecesora, mucho iPhone y mucho internet y cada día hay más ignorantes por metro cuadrado’
Habla muy claro Johnny B. Nasty (Barcelona) así que no os hago una introducción muy extensa, que la entrevista ya lo es y se tocan muchos temas diferentes, incluidas las piezas de coleccionismo de Kiss que tiene en caja fuerte el entrevistado.
Bienvenido a Metalcry. ¿Sueles entrar en ella a menudo? Yo en Facebook o Twitter no creo mucho, no me acostumbro a usarlos. Cuando me conecto a Internet prefiero visitar webs musicales (admito que Xvideos.com también lo tengo en favoritos) y siempre pregunto a conocidos cuáles son sus preferidas por si encuentro alguna interesante y desconocida para mí, ¿sueles bucear por webs musicales y quieres recomendarme alguna que consideres interesante?
Johnny: Pues te seré sincero, conozco Metalcry porque tenéis mucha presencia en la red y siempre hay alguna noticia interesante que me hace darle al link para entrar a leerla, pero no soy muy fiel a la prensa musical a día de hoy. Suelo chequear webs como www.efeeme.com que se acercan más a mi filosofía y no centrarme tan sólo en un estilo aunque tampoco comulgue al 100% con sus propuestas, lógico por otro lado; también sigo siendo un fiel lector y comprador de Popular 1 y esporádicamente de Ruta 66. Aparte de eso, hace tiempo que me desencanté bastante con la prensa musical nacional, honestamente.
Respecto a lo que comentas de Facebook y Twitter, estoy totalmente de acuerdo contigo. Facebook es una buena herramienta si sabes usarla en su justa medida, pero a mucha peña se le ha ido la olla directamente magnificando todo lo que pasa dentro de ese patio de marujas que es lo que es realmente. Twitter tuve, pero lo di de baja recientemente, sinceramente, no comprendo esa red, no le veo sentido, demasiado desorden y demasiada “información” instantánea que te hace sentirte asfixiado. Antaño las redes sociales como a todo hijo de vecino me tuvieron muy absorbido, pero al final me he pasado al otro extremo y sinceramente ya casi ni actualizo mi página en Facebook más que cuando hay alguna noticia que dar.
Ya paso directamente con la entrevista. Antes de tocar tus últimas grabaciones quiero lanzarte un par de preguntas sobre Rockdising Producciones. ¿Cuál es el estado actual de Rockdising Producciones? ¿Qué inquietud llevabas dentro para querer involucrarte en un sello discográfico?
Johnny: Bueno, antes de nada, aclarar que Rockdising fue inicialmente una web de servicios musicales que monté junto a mis dos mejores amigos. Pero a día de hoy, ha surgido la oportunidad de comenzar un nuevo portal al margen, algo muy grande, un proyecto con mucho futuro, del que sin embargo me he desvinculado porque no me veía con la ilusión necesaria, tenía que dar el 100% de mí (igual que mis compañeros, por supuesto), y eso es justo lo contrario de mis actuales inquietudes que van por otros derroteros. Les propuse que continuasen ellos con Rockdising pero se vieron imposibilitados, cada uno de ellos tienen sus propias historias y no podían ocuparse de ninguna otra. Entonces, como me había dado de alta como sello para poder subir mi música a Spotify y demás plataformas, me he limitado a dejarlo así pero aviso que no somos ninguna compañía discográfica ni gano nada con ello, subo mis discos y los de mis amigos, enlazo el catálogo a sus páginas y los beneficios los reciben ellos, no yo. Pero queda bonito eso de tener un “sello discográfico” en estos tiempos bizarros que corren para la música enlatada (Risas).
“Nastyvity In Black” es uno de los discos que ha editado Rockdising Producciones. No se vende en una caja de plástico estándar, sino en una funda de color negro de tamaño vinilo siete pulgadas. El disco compacto es de color negro y se acompaña con un cómic de ¡¡20 páginas a todo color!! La hostia. Mi mujer nada más que lo vio me preguntó si una cosa así compensaba en gastos. Pero ¿eres sincero y nos dices cuántas ventas ha tenido en los tres meses que lleva en la calle? ¿A qué precio lo estás vendiendo, gastos de envío incluidos?
Johnny: ¡Muy buena la reacción de tu esposa! (Risas), la verdad es que he agotado la primera tirada y ya están fabricándome la nueva. ¿Rentable? Según lo mires… Yo lo vendo muy barato, si me lo compras en mano, sólo voy a pedirte diez euros por un producto como ese que ha llevado un trabajo epopéyico verlo realizado, si lo compras por correo, te costará quince porque siempre envío certificado y de ese modo evito que Correos extravíe los pedidos. ¿Ganancias reales para mí? Pocas, ¿pero qué importa? No lo hago por dinero, lo hago por la ilusión de ofrecer algo original. La industria de la música ha evolucionado, ha cambiado, dejemos ya el tema de la piratería aparte que es un obvio daño colateral; la gente no es tonta y se ha cansado de pagar 20 euros por un caja de plástico con un CD de ínfima calidad acompañado de un “libreto” que no es más que una hoja doblada. Me han encantado las reacciones de la gente una vez ha tenido el “Nastyvity” en sus manos, ¡llegaron a decirme que no sabían donde guardarlo! ¿con los singles de vinilo por el tamaño?, ¿en la estantería de cómics?, ¿en un hueco con los CD’s? Todas esas cosas me hacen reír mucho a la par que obviamente, Quim (el dibujante que ha hecho ese gran trabajo gráfico) y yo, nos sentimos muy gratificados.
¿Ya les has mandado la copia a José Luis Campuzano y Carolina Cortés por sus colaboraciones en “Nastyvity In Black”?
Johnny: Por supuesto, precisamente Carolina me escribió hace dos días para decirme que les ha gustado mucho. Eso me hizo sentir muy feliz.
¿Las reseñas de “Nastyvity In Black” son lo esperado? ¿Estás contento con su promoción? Porque por muy buen disco que sea, sin promoción es como si no existiera…
Johnny: Bueno, mis promos son lo que son, no tengo medios y me dedico al boca-oreja, que es el marketing de los pobres (Risas). Afortunadamente llevo muchísimos años en esto y tengo muchos amigos que me apoyan y siempre que esté en sus manos me echan un cable, lo cual es reconfortante.
Lo más espectacular de todo han sido las dos páginas que me dedicaron recientemente en Popular 1, eso fue un sueño hecho realidad para mí, pero como siempre digo, le estoy igual de agradecido a una publicación tan prestigiosa como a cualquier fanzine, blog o lo que sea que me dedique un pequeño rincón, esos detalles no tienen precio para mí. Respecto a las reseñas en sí hay de todo, siempre depende de la línea editorial de quién publica. Si la reseña la hacen en una web dedicada al metal, sus referencias son sólo eso, metálicas, “Suena a Barón Rojo, recuerda a Kiss, influencias de W.A.S.P.”, que por supuesto es cierto, pero hay mucho más ahí escondido que no todo el mundo ha sabido ver. En “Nastyvity” hay surf, psychobilly, hay homenajes a Thin Lizzy… muchos guiños humorísticos a tópicos rockeros (el “number seven” por ejemplo, que es un parodia del “number nine” de los Beatles).
Luego está el tema de la producción, unos opinan que es fantástica y otros que suena terrible (Risas). Todo el mundo coincide eso si, en que hay mucha oscuridad en las letras, pero es que ese disco me salió así; sin perder mi sentido del humor, algo que me viene de serie, en este disco he escupido mucha bilis, algo que me era necesario en ese punto de mi vida, pero ya pasó. Ya está hecho y no me quedan más escupitajos por el momento (Risas).
Me comentaste que no harías conciertos para presentar ese disco. ¿Has cambiado de opinión? ¿No hay conciertos de presentación de “Nastyvity In Black”? ¿No has barajado la posibilidad de algún bolo donde poder vender algunas copias?
Johnny: Si, van a haber finalmente conciertos aunque ya para finales de año, acabo de empezar a ensayar con una nueva banda y pronto presentaré en sociedad a mis nuevos compañeros de batalla. Estos últimos años han sido muy duros para mí, pero ahora necesito rockear de nuevo. No puedo prometer presentaciones en diferentes ciudades ni nada por el estilo porque la situación actual es compleja y no es fácil sacar adelante esos proyectos sin perder dinero, cosa que no me importaría si lo tuviese, pero como no es el caso, vamos a dejarnos llevar y ver que pasa. Como mínimo habrá una presentación en Barcelona a finales de 2014, después ya veremos.
Un tema de Johnny B. Nasty apareció en el recopilatorio “Rock Party Volumen 2 del ARF” en 2012, ¿algo similar próximamente? Esos recopilatorios son siempre una buena campaña de promoción para que gente muy diferente pueda escuchar tu música…
Johnny: Pues por ahora no hay nada parecido a la vista, tampoco me lo han ofrecido. Cuando edité mi primer disco en solitario aparecí en varias recopilaciones (podéis verlas en mi web), pero desde lo del Azkena no he vuelto a participar en ningún disco de ese estilo salvo el reciente tributo a Kiss.
Toquemos el reciente tributo de Kiss titulado “Welcome To The Spanish Tribute To Kiss” editado por TYR Produktions y en el que incluyes una versión de su “Naked City” y otra del disco en solitario de 1978 de Gene Simmons. ¿Tienes enchufe para poder haber incluido dos versiones?
Johnny: (Risas) No, enchufes cero, simplemente mi amigo Sugar Kane de la banda barcelonesa Lipstick me comentó que les habían ofrecido participar en ese tributo, me puso en contacto con la gente de TYR Produktions y como ya tenía grabado “Naked City”, les gustó y eso fue todo.
Por supuesto hay algún que otro bussiness de por medio que no estoy autorizado a contar, pero sí quiero aclarar que la cosa no era tan sencilla como “¿cuánto me cuesta aparecer en ese disco?”. Luego me propusieron grabar, si me apetecía, una segunda versión para la edición en vinilo y como soy un animal y me lanzo rápidamente a la piscina aunque esté vacía, me puse a ello y en dos putas tardes les entregué la versión del “Radioactive”. Al final, todas han ido a parar al CD, sólo que la segunda como hidden track. Al comienzo no solía contarlo pero lo de que esos dos tracks aparecen en el CD es ya de dominio público, por lo tanto no tiene mayor importancia. Eso si, para los coleccionistas, recomiendo la edición en vinilo que ha quedado preciosa, igual que el CD.
¿Te consideras muy fan de Kiss? ¿Tienes algún vinilo o cosilla extraña de ellos de la que te sientas especialmente orgulloso?
Johnny: Claro que soy un gran fan de Kiss, pero no siento ya el mismo cariño por ellos que antaño a causa de una serie de motivos demasiado extensos de explicar aunque a la par bastante obvios (¿Tommy Thayer y Eric Singer quizás?) (Risas).
En una etapa de mi vida coleccioné cualquier chorrada dedicada a Kiss, ahora valoro más vivir en un espacio respirable que rodeado de trastos. Conservo casi todo lo que guardaba de Kiss pero también me he deshecho de muchas cosas. Tengo algunos fetiches muy entrañables como varias bolsitas con confeti de cada concierto de la gira española de 1997 y del tour de “Psycho Circus” en Paris, tengo púas de Paul Stanley lanzadas por él en los shows, pases de backstage que me regalaron (antiguos, no que yo haya accedido a sus camerinos) y el fetiche más kistch de cuantos poseo: un boli con el que Ace Frehley me firmó un autógrafo. La historia es la siguiente, Ace comenzó a firmarme una postal de Kiss con un rotulador plateado, y justo cuando había escrito la “A” de Ace ¡el jodido rotulador se gastó!, de modo que en una reacción de emergencia al ver que se marchaba, le ofrecí un bolígrafo, me firmó el autógrafo, ¡y el cabrito lo lanzó por los aires y nos dejó a todos con la boca abierta como idiotas mientras se marchaba al hotel! Naturalmente, agarré el boli del suelo y nadie más ha vuelto a tocarlo desde entonces. Tengo el ADN de Ace Frehley en un cajón de mi escritorio (Risas). Esto sucedió en Barcelona en 1997, el día anterior a su concierto en el Palacio de los Deportes y desde entonces soy el orgulloso poseedor de una postal con una letra A plateada y un autógrafo a boli de Space Ace (Risas).
Ya de paso ¿tienes copias de “Johnny B. Nasty & The Rock Circus” (2010 y “Nastyvity In Black” (2013)? ¿También se te puede pedir el “Welcome To The Spanish Tribute To Kiss” a ti mismo?
Johnny: Del primer disco no me queda ni una copia, por ahora no me apetece reeditarlo (aunque puede comprarse en versión digital a un precio muy económico en Bandcamp), y cuando lo haga, reharé parte del artwork ya que el original no se hizo exactamente como yo lo tenía en mente. Los otros dos discos, se me pueden encargar a mí sin problemas, aunque el tributo a Kiss puede serle comprado a cualquiera de los grupos que participan. Yo particularmente lo ofrezco por 5 €, diez con gastos de envío, pero ignoro a qué precios se está vendiendo por ahí. Lo mejor que podéis hacer es escribir a Raúl Girona, el auténtico artífice y alma del proyecto y él os informará, su correo es el siguiente: tyrproduktions@gmail.com
¿Qué opinas de colocar para descarga alguna de las grabaciones pertenecientes a Johnny B. Nasty y citadas en esta entrevista?
Johnny: Este tema es tan simple como peliagudo. Verás. Cuando lancé mi primer trabajo fuera de Nasty Army, me pilló en una época en la que internet me parecía un medio maravilloso para autopromocionarme, ¡llegaré a todo el mundo!, ¡si ya nadie compra discos, qué importa regalarlo!, entonces comencé a comprobar feliz que el disco tuvo 3000 descargas en Mediafire, en Jamendo 700 o así, todo genial y muy bonito, hasta que me di cuenta que las ventas en CD habían sido una puta mierda y me dije, ¿así que ésto es el resultado de la libertad en internet, no? ¿así que quién se baje el disco, si le gusta, se lo comprará, no?
Hombre, puedo entender que si se lo bajaron 4000 personas, no iba a vender 4000 copias, pero apenas fueron un par de centenares lo que se vendió. Esto, y mi progresivo desencanto con internet, fue lo que me llevó a ponerle fin a este asunto. Nadie puede acusarme de no poder oír mi música, entra en Grooveshark (plataforma que no paga un céntimo a sus usuarios, todo sea dicho de paso), entra en Spotify, donde sea… Incluso hay una aplicación gratuíta para llevar mi nuevo disco a cuestas si te apetece; insisto, gratuita, no cuesta nada y tienes gratis “Nastyvity In Black” en tu teléfono, tablet, o donde te apetezca ( http://www.johnnybnasty.com/nastyvity-app-for-android/ ). Pero nada más.
Además, si puedes oír mi disco gratis en cualquier sitio, ¿porqué algunos me señalan por haber retirado su libre descarga?, no lo entiendo, ¿no se tratará de un caso de avaricia patológica lo que padecen algunos? No pienso volver a pasar por el aro de los defensores de la “democracia en la red”, que al final son más fascistas que Hitler, y lo digo con todas las consecuencias me ataquen por donde me ataquen. Yo no vivo de mi música por desgracia, no me he cambiado de chaqueta, sigo siendo el amo y señor de mi obra y no tengo inconveniente en regalarte mis discos si son para un proyecto sin ánimo de lucro (hace poco, cedí un tema para la banda sonora de una campaña de crowdfunding), pero si quieres tener el disco en archivos digitales, tienes dos opciones, te gastas 6 miserables euros, o lo pirateas que hay mil formas de hacerlo, pero no te lo voy a poner en bandeja encima.
La pregunta de opinión discutible: ¿crees qué en este país cuesta más comprarse un disco por la crisis que nos han hecho padecer o por una cultura tipo “Lazarillo de Tormes”? Internet no es gratis, hay que pagar una conexión, pero luego alguno peta el disco duro con emepetreses y películas, pero si es verdad que en otros países se valora más la música como cultura que aquí, aunque se tenga internet se suelan comprar todavía discos o películas. Tú, ¿cómo lo ves?
Johnny: Internet ha resultado ser una tomadura de pelo. Como herramienta informativa y cultural (siempre que las fuentes sean fiables y no un rumor extendido por cuatro enterados) es una maravilla, pero cuando entran en acción los clásicos gurús de la filosofía del “todo gratis”, los comentaristas baratos, los trolls maliciosos y demás curia, la cosa se vuelve ciertamente incómoda. Y ojo, no ataco a la gente que se baja música ilegalmente, si te ponen en bandeja las herramientas para hacerlo no puedes esperar que la gente no le saque provecho, la culpa no es de la gente sino de las autoridades que lo permiten.
Mucha Ley Sinde y mucha Ley SOPA Knorr, mucho cerrar Megaupload y mucha tontería pero no van al meollo del asunto porque no les interesa, así de claro. Esas supuestas luchas en pro de los derechos de los creadores son todo mentira, punto. Por otro lado, al margen de todo esto que acabo de decir, nunca te olvides que Spain Is Different. Aquí no hay respeto por nada. Ni por sus leyendas de la música (folclóricas con bigote aparte), ni por nada que tenga que ver con la verdadera cultura (¡si aquí asesinar animales se considera patrimonio “cultural de la humanidad”!).
La gente lleva en su ADN el latrocinio desde los tiempos de la famosa picaresca que tan bien reflejó el gran Fernán Gómez en aquella teleserie de los años 70. Aquí todo son modas, y cuando esas modas pasan, se esconden en el sótano de la memoria a buen recaudo para sólamente repescarlas con cuentagotas en patéticos revivals nostálgicos que encima son muy poco objetivos normalmente. Es lo que hay y con ello debemos aprender a convivir. Y cada nueva generación que surge está más involucionada que su predecesora, mucho iPhone y mucho internet y cada día hay más ignorantes por metro cuadrado.
La pregunta distendida: “La industria es una mierda, lo que es grande es el medio”, lo dijo Lauren Bacall sobre el cine. Tú, ¿cómo lo ves con respecto a la música?
Johnny: Exactamente igual. Los medios de los que disponemos actualmente son grandiosos, pero están muy mal usados y desaprovechados. Siempre lo he dicho y no me cansaré de repetirlo: no soy nostálgico, ni del vinilo ni de nada, sé verle su lado bueno a todo, al mp3, a los iPods, al CD, al mismo plástico de 33 o 45 RPM, al streaming… Nostalgia cero por mi parte, pero hay que poner orden en este desaguisado. ¿Cómo? Pues ni idea. El Poder, es quién tiene las claves y es obvio que no hacen nada porque no les interesa. Mantener a la gente anestesiada con las redes sociales y haciéndoles creer que con internet todo está “democratizado”, es lo que les interesa, mientras la peña siga tragándose esa patraña, nada cambiará.
Acabo. Yo ya te he presentado y en Metalcry al menos puedes decir que te hemos hecho un hueco. ¿Tú crees que me dejo algo? Si eso añádelo tú y ya de paso nos dejas tus últimas palabras para Metalcry…
Johnny: Eso de últimas palabras suena chungo, tío (Risas). Sólo quiero agradeceros el apoyo brindado y especialmente a ti, Arcadio, que siempre te has portado de puta madre conmigo. Por supuesto, matizar que todo lo que he expuesto en esta entrevista no dejan de ser opiniones personales, nadie posee la verdad universal, luego que cada cual extraiga sus propias conclusiones. Un abrazo a todo el mundo, paz, amor y Rock ‘n’ Roll!!