RIVERSIDE + MAQAMA – SALA CARACOL, MADRID – 27/09/2013
«RIVERSIDE crean su nueva generación de esclavos en Madrid.»
La tarde prometía desde mucho antes de empezar. RIVERSIDE son un grupo que ha ido creciendo con cada disco, ganándose la admiración y el respeto de un número cada vez mayor de fans a lo largo y ancho del mundo gracias a unos inteligentes trabajos en estudio y a unas intensas y sinceras interpretaciones en directo. Su gira presentando su último “Shrine Of New Generation Slaves” llegaba a España con tiempo más que suficiente para haber disfrutado del disco y habernos aprendido sus canciones. Reunidos a la entrada de la madrileña sala Caracol y amenazados por una lluvia intermitente, todos esperábamos la apertura de puertas. Había ganas de ver a Mariusz Duda y los suyos, pero antes tendríamos que prestarle atención a otro combinado polaco.
MAQAMA llegaban como unos desconocidos casi totales para la mayoría del público. El grupo, también polaco, saltó al escenario sin tapujos y dispuestos a demostrarnos porqué acompañaban a RIVERSIDE en su gira. El cuarteto liderado por Kamil Haidar (que se dirigió al público prácticamente todo el tiempo en un castellano razonablemente fluido) nos ofreció un sonido que no dista tanto del popularizado por RIVERSIDE, pero que guarda una personalidad bien definida en temas como la inicial “Exile”, “Judas” o la étnica “Uciekaj”, con cierto aire árabe.
El grupo se mostró seguro y disfrutó de un sonido lo suficientemente bueno como para percibir los detalles de sus temas, que fueron dibujando un concierto “in crescendo”, que acabó convirtiéndose en toda una fiesta. El grupo pasó de ser un completo desconocido para el público a convertirse en un acto celebrado e interesante, del que estoy seguro que la mayoría buscó material nada más llegar a casa. Temas cómo “Darfur”, “Save Breath”, la fantástica “Ronin” o “Dream Catcher”, con la que cerraron su actuación, fueron una perfecta carta de presentación para un grupo que llama con fuerza a la puerta de todos los aficionados al metal progresivo.
Y tras la actuación de MAQAMA le llegaba el turno a los cabezas de cartel, que vieron como la Caracol se llenaba prácticamente hasta el límite de su aforo para recibirles en el que fue su concierto más multitudinario en España en su historia. El grupo saltó al escenario dispuestos a dar lo mejor de si mismos y cuando “New Generation Slave” arrancaba la banda se topó con unos problemas en la guitarra, que obligaron al resto del grupo a improvisar una entretenida “jam session” sobre la parte central de su tema, alargándolo varios minutos hasta convertirlo en la versión más larga del tema que la banda había interpretado hasta entonces, en palabras del propio Duda. Son detalles como estos los que hacen de RIVERSIDE un grupo especial, y es que no todo el mundo es capaz de convertir un problema técnico en un momento único e irrepetible para su público.
Desde el primer momento el combinado polaco se mostró intenso, activo y con muchas ganas de agradar, desgranando un setlist que dio buena cuenta de su último disco sin olvidarse de su trayectoria anterior. Así la banda puso sobre el escenario todas sus cualidades interpretativas con temas como “The Depth Of Self-Delusion”, “Feel Like Falling” (muy celebrada por un público entregado al grupo desde el primer momento), “Reality Dream III” o la interesantísima “Living In The Past”, de su EP “Memories In My Head”, que fue recibida con vítores y aplausos como uno de los mejores momentos del concierto, causando incluso cierta sorpresa en la banda.
Personalmente uno de los momentos más esperados de este concierto era la interpretación de “We Got Used To Us”, uno de mis cortes favoritos de su último lanzamiento y, por fortuna, el grupo no me hizo esperar demasiado y cuajó una interpretación realmente mágica del tema. “Egoist Edonist” fue la primera encargada de recordar su anterior trabajo “Anno Domini High Definition” y “02 Panic Room” nos trajo a la memoria aquel fantástico “Rapid Eye Movement”. El sonido, aunque bastante bueno, no se libró de un par de pequeños fallos que por momentos ocultaron un poco la voz de Mariusz o nos mostraron al bajo demasiado alto, tapando algunos detalles de las hermosas melodías del grupo.
Además de Duda, que con los años se ha convertido en un excelente frontman, la actuación del teclista Michal Lapaj fue uno de los elementos más destacados del concierto. La banda no se olvidó de los temas favoritos de sus fans y nos regaló una interpretación impecable de “Concevieng You”, que dio entrada a “Escalador Shrine”, uno de los cortes más celebrados de su nuevo disco y que marcaba el primer punto y aparte del concierto. El grupo se retiró y regresó para ofrecernos un bis compuesto por “Celebrity Touch”, también de su último disco, y “Left Out”, representante de su anterior y exitoso trabajo. Parecía que el concierto había llegado a su fin, pero el público seguía expectante, reclamando algo más y la banda nos lo regaló en la forma de “Second Life Syndrome”, un broche ideal para un concierto enérgico, intenso y lleno de magia que ninguno de los asistentes olvidará con facilidad. Esperemos que no tarden mucho en volver.